Se llama Eufemismo a aquella forma de nombrar e interpretar las cosas con términos menos gruesos o malsonantes de los que en realidad le corresponderían. Así, decimos de fulanito que es “de hueso ancho”, por no llamarle gordo, o tengo “un rollo con fulanita” para no decir que me la estoy tirando. Lo que sucede es que, combinaciones de ciertos términos lingüísticos se convierten en antitéticos, es decir, el término Clase unido al término Política es una contradicción eufemística. Como el de Inteligencia Militar. Dada la trayectoria de los políticos en este País, y lo que nos queda por ver, un político puede tener de todo, menos Clase, y sálvese el que pueda. En realidad, cuando se utilizan términos denominados como Eufemismos, se está mintiendo…con palabras más finas, pero se está mintiendo y punto. Porque falsear la realidad usando términos rebuscados, es mentir.

El caso de las manifestaciones de Valencia es el mejor ejemplo de lo que digo. Porque de muchas maneras se nos está intentando convencer de que los manifestantes son un peligro ya que, su derecho constitucional a protestar, choca con el derecho del resto de ciudadanos a moverse libremente. Para evitar eso, se manda a la Policía, que actúa con arreglo a las órdenes que dicta un político. La policía no sale a la calle a aporrear a la gente y menos a un grupo más o menos numeroso de críos de 14 o 15 años que piden calefacción en las aulas donde estudian. La decisión política consiste en que alguien con mucho mando entiende que, entre esos estudiantes, hay elementos peligrosos, terroristas urbanos, y recibe la orden de “sacudir estopa” a todo lo que se mueva. Así las cosas, no es que se detenga por las bravas a jóvenes estudiantes, es que se ha herido a reporteros, periodistas e incluso peatones ajenos que circulaban por el lugar de los hechos. Aquello, alguien con una mala interpretación y que tiene que dejar su responsabilidad, ya mismo, lo ha convertido en una salvajada digna de guerrilla urbana, utilizando a la Policía para ello y para dejar claro que, en este País y con este Gobierno, el que se mueva, o no sale en la foto o sale con la cabeza abierta.

Luego, tras lo que todos hemos podido ver por televisión, vienen las justificaciones, porque si algo distingue a la Clase Política es el empeño en “mantenella y no enmendalla”. Responsables políticos y otros Delegados de causas perdidas de este Gobierno, se empeñan en justificar la actuación policial, diciendo que ha sido proporcionada, dado el nivel de violencia de los manifestantes, y cuando uno ve cabezas abiertas y sangrando como consecuencia de esta actuación justa y proporcionada (Eufemismo), te dice que ellos gobiernan con casi 11 millones de votos, luego la inmensa mayoría del Pueblo Español les ha dado un aval muy claro para coger el toro por los cuernos, lo que por cierto, es otro Eufemismo de hacer lo que me pasa por los cojones que para eso me habéis votado. ¡¡¡Que estáis faltos de mano dura, y alguien os lo tiene que demostrar, coño!!!. 

En este “maremagnum” de estupideces para intentar demostrar quien escupe más lejos, sale la Clase Política a poner paz. Otro Eufemismo para decir que, en casos de protestas, voy a imponer el Orden por la vía que me parezca conveniente, porque para ello cuento con los votos de casi 11 millones de españoles.

El Portavoz del PP en el Senado no considera que el Ministro del Interior, señor Gallardón, deba de dar explicaciones ninguna, sobre los hechos. Distintos Medios de Comunicación de la Derecha Ultramontana, justifican lo sucedido en la presencia de los indignados del 15-M alegando que, ese chico que sale sangrando, lleva rastas en el pelo y piercings en el rostro, luego ya es por si mismo sospechoso de liarla y, si le abren la cabeza, se le cose y asunto terminado. Así sucesivamente en las apariciones de la Clase Política que, con argumentos de este tipo, demuestran su verdadera Clase, la de matones con sueldo fijo de la Administración. Hasta que aparece el señor Valcárcel, Presidente de la Comunidad de Murcia quien, sin ningún tipo de pudor, acusa de los hechos a los padres, porque lo que no se aprende en la Escuela, hay que enseñarlo en casa. Por cierto, este discurso perfectamente ambientado con imágenes de una chica de unos 14 años, con mochila a la espalda que, rodeada por 4 policías, es sujetada, zarandeada, transportada en vilo y arrojada como una bolsa de basura, al interior de un furgón policial. ¡¡¡Cuatro valientes servidores del bien público que se limitan a hacer lo que un político les ha ordenado!!!. Supongo que la responsabilidad de los padres, según interpreto al señor Valcárcel, pasará por enseñarle a los chicos en casa, como se debe caer bien cuando cuatro policías te tiran dentro de un furgón y no hacerte daño. Eso es una actuación coordinada y justa que intenta velar por los derechos del resto de ciudadanos que pasaban por allí. Luego ya, si hay víctimas colaterales, se explicará, siempre que yo lo considere oportuno, pues casi 11 millones de votos, me dan validez para hacer esto y más.   

Llamar a esto Eufemismo es un Eufemismo intrínseco. Esto no deja de ser una salvajada que teóricamente, se ve avalada por casi 11 millones de votos. Y esto es lo que hay, no busquemos explicaciones, que nos lían. Las protestas contra la Reforma Laboral, no tienen ningún valor ya que no reúnen a los millones de personas que nos han votado. “Estamos dispuestos a escuchar las reivindicaciones de los Sindicatos pero a estas reuniones, se viene a trabajar”, dijo Fátima Báñez, Ministra de Trabajo, se ve que en clara alusión a que los Sindicatos se pasan el día rascándose la entrepierna. Si algún día me da por recoger en un libro las barbaridades que estos tipos sueltan, me forro. ¿Qué se fumarán antes del desayuno?. Ana Botella, Alcaldesa actual de Madrid Capital de España, sobre el Prestige…”Buena gana de andar buscando culpables del accidente. Ni el Gobierno ni las autoridades tienen la culpa de todo esto. El único responsable en el barco”. ¡¡¡Mamá, mamá…que el pinipong me ha mordido!!!. Y es que son como niños.

Esto tiene un peligro y no se dan cuenta…: el día que los más de 5 millones de parados, más los que estamos en casa con un ERE, más los que tienen una baja por invalidez, más todos los desheredados de esta España nuestra, se tiren a la calle a soltar mandobles, no serán los casi 11 millones de votantes del PP, pero se va a liar gorda. El ruido se va a escuchar desde Islandia, paradigma de los derechos ciudadanos conquistados en la calle y que terminó con cientos de Banqueros, Políticos corruptos y Empresarios chorizos, en la cárcel. Lo digo porque ahora, la CEOE mantiene que los trabajadores españoles tenemos que hacer lo mismo que los de los Países Nórdicos, pero se olvida de donde están los considerados culpables de aquella movida. Trabajadores acusados y cumpliendo pena de cárcel, hay muy poquitos comparados con el número de responsables que mandaban.