Desde hace unos años, muy pocos (4 o 5 a lo sumo), los vecinos de Montijo venimos disfrutando de unas agradables noches de cine en el Parque Municipal. El Parque de la Cruz ha sido siempre un entorno entrañable para los montijanos de todas las generaciones. Y estos Jueves de Cine nos han dado la oportunidad de recuperar este espacio desaprovechado por costumbre. Los dirigentes de Montijo lo han tomado y dejado por modas. Las familias enteras lo hemos disfrutado en sus parques infantiles, su kiosco y su puesto de chuches para los chicos y las pipas para los adultos. Pero, parece que aquí las tradiciones no se quieren conservar. Es más progre estar siempre a la greña, detractando lo que el otro hace bien solo por el hecho de creerlo mi contrario. Aunque quién critica monte el botellón por un parque digno para dar ejemplo a sus hijos y el Ayuntamiento no se oponga. El cine de los jueves ha dado la oportunidad a las familias de Montijo de volvernos a reunir y compartir los juegos y las vivencias de nuestros hijos. Nos llevamos la cena de los peques y disfrutamos de sus caritas viendo en la pantalla grande y al fresco del verano, emocionados a sus héroes y princesas; a sus amigos de cuentos y fantasías, lejos de la jaula del piso o de la caja tonta que aísla. Y además GRATIS.

Porque se trata de una actividad para promover las relaciones entre vecinos, realizadas por gente joven con ganas de agradar y hacer bien su trabajo. Por el que cobran un sueldo. Es verdad. Pero creo que la dedicación que estas Monitoras Socioculturales están ofreciendo a los montijanos de todas las edades no está pagado con dinero ninguno. A lo mejor, es que tienen una calidad humana descomunal y nos dicen con su buen hacer que dan gracias por poder ir cada día a su trabajo, con la que está cayendo. Pero, volvemos a las mismas, es mejor la crítica destructiva. Y si con ella desmotivamos al personal, mejor: habremos logrado el objetivo, que no es otro que estropear la jugada de otros para que no puedan demostrar nunca que se están haciendo las cosas mejor que antes.

A los niños no les importan los intereses de la SGAE. (Ya se han forrado bastante: ellos y los de la farándula). Les da igual lo del Screener y si hay fallos técnicos son fáciles de consolar. Porque ellos no tienen la mala idea de que el responsable lo ha hecho a posta. Ellos son más sanos que los adultos. Y eso pasa hasta en las grandes salas, con la salvedad de que ahí si que se paga y es una explotación con ánimo de lucro. Si queremos unos adultos más tolerantes de lo que somos los tenemos que educar. No darles este ejemplo.

O hay gente que presume de dialogante y solo gruñe cuando lo dejan. O es que tienen alguna desazón que los está reconcomiendo por alguna frustración de objetivos y tienen que hacer méritos. De otra forma no se explica.
Nuestra enhorabuena a los programadores y nuestra más absoluta adhesión a esas Monitoras que en silencio solo trabajan y muy bien, aunque intenten ponerles zancadillas que ellas saben muy bien sortear.