Rehabilitación de los márgenes del rio Guadajira
Según ha informado la
Junta de Extremadura, ha concluido la rehabilitación de márgenes y riberas en
tramo del río Guadajira, con el fin de llevarlo a un adecuado estado ecológico,
las actuaciones han estado encaminadas a estabilizar los taludes del cauce,
mejorar la estructura y la calidad del bosque de ribera, incrementando su grado
de naturalidad, y promovieron refugios para la fauna, además de corregir y
compensar otros impactos residuales.
La directora general de Evaluación y
Calidad Ambiental, María Pérez, ha explicado que la rehabilitación o la
restauración fluvial es un proceso "complejo" que requiere una
correcta planificación, puesta en marcha de actuaciones concretas y
seguimiento.
Para recuperar el tramo elegido del río
Guadajira, afluente del Guadiana, se han llevado a cabo varias actuaciones con
el objetivo final de facilitar su rehabilitación y devolverle el máximo grado
de naturalidad y funcionalidad posibles, ya que presentaba un alto nivel de
degradación y un mal estado ecológico, que imposibilitaba la restauración
fluvial real.
Por ello, se ha procedido a la
rehabilitación de un tramo que comprende 640 metros de longitud, con una manga
lateral a su izquierda de 690 metros, adoptando un conjunto de medidas
factibles para su mejora".
El espacio elegido se sitúa en el río
Guadajira, a poco más de un kilómetro de su confluencia con el río Guadiana, el
cual presenta una fuerte intervención del hombre por la nueva presa situada en
Villalba de los Barros y por las aportaciones estivales de agua, procedente del
riego de las vegas.
La actuación se divide en 3 tramos
diferenciados, el primero de ellos, de unos 440 metros de longitud, se sitúa
por donde transcurren actualmente las aguas fluviales.
El segundo tramo es una manga de unos
690 metros de longitud, que está prácticamente desaparecida, y el tercer tramo,
de unos 240 metros de longitud, se sitúa a pocos metros del primero, siendo su
cauce natural.
En los dos últimos tramos, las aguas
que antes recorría por ellos han desaparecido prácticamente y el espacio ha
sido ocupado por grandes estructuras de zarzamora, que pueden alcanzar hasta
los 4 metros de altura e incluso dominar todo el lecho del antiguo río.
Las obras y actuaciones han consistido
en eliminación de cañas, zarzas y otras herbáceas; podas, cortas y eliminación
de especies exóticas; retirada de escombros y restos vegetales; estabilización
de taludes y plantaciones y densificaciones con especies autóctonas (alisos,
fresnos, chopos y sauces).
Con ello, se pretende reducir las
frecuentes inundaciones al tiempo que se facilita la evacuación de agua en
época de crecidas.
En las actuaciones se complementaron
obras de mejora para la fauna mediante la creación de zonas de refugio tanto
dentro del cauce como en sus orillas; así mismo, se colocaron cajas nido para
favorecer el refugio de la avifauna.
El proyecto RICOVER es un programa
Interreg, dotado con 1,3 millones de euros procedentes de la Unión Europea, que
tiene por objetivo definir y realizar, a través de intervenciones piloto,
estrategias y metodologías conjuntas de bioingeniería para la protección y
conservación de los ríos de este espacio europeo.
España que participa con Portugal en el
mismo marco, realizarán otras actuaciones similares en el río Ter, Cataluña y
en Odelouca, Algarve. EFE
El río Guadajira es un río
afluente del Guadiana en Extremadura. Es conocido coloquialmente en la comarca
como Rivera de Guadajira.Nace en diversas fuentes de las Sierras de Feria,
discurre junto a los pueblos de Feria, Villalba de los Barros, Solana de los
Barros y Guadajira, entidad menor de Lobón, hasta su desembocadura en el río Guadiana.
Según la Confederación de la cuenca hidrográfica del Guadiana tiene una
longitud de 73,54 kilómetros, su cuenca ocupa una superficie de 895,94
kilómetros cuadrados, y recibe unas aportaciones naturales de 41,91 hectómetros
cúbicos.
Según ha informado la
Junta de Extremadura, ha concluido la rehabilitación de márgenes y riberas en
tramo del río Guadajira, con el fin de llevarlo a un adecuado estado ecológico,
las actuaciones han estado encaminadas a estabilizar los taludes del cauce,
mejorar la estructura y la calidad del bosque de ribera, incrementando su grado
de naturalidad, y promovieron refugios para la fauna, además de corregir y
compensar otros impactos residuales.
La directora general de Evaluación y
Calidad Ambiental, María Pérez, ha explicado que la rehabilitación o la
restauración fluvial es un proceso "complejo" que requiere una
correcta planificación, puesta en marcha de actuaciones concretas y
seguimiento.
Para recuperar el tramo elegido del río
Guadajira, afluente del Guadiana, se han llevado a cabo varias actuaciones con
el objetivo final de facilitar su rehabilitación y devolverle el máximo grado
de naturalidad y funcionalidad posibles, ya que presentaba un alto nivel de
degradación y un mal estado ecológico, que imposibilitaba la restauración
fluvial real.
Por ello, se ha procedido a la
rehabilitación de un tramo que comprende 640 metros de longitud, con una manga
lateral a su izquierda de 690 metros, adoptando un conjunto de medidas
factibles para su mejora".
El espacio elegido se sitúa en el río
Guadajira, a poco más de un kilómetro de su confluencia con el río Guadiana, el
cual presenta una fuerte intervención del hombre por la nueva presa situada en
Villalba de los Barros y por las aportaciones estivales de agua, procedente del
riego de las vegas.
La actuación se divide en 3 tramos
diferenciados, el primero de ellos, de unos 440 metros de longitud, se sitúa
por donde transcurren actualmente las aguas fluviales.
El segundo tramo es una manga de unos
690 metros de longitud, que está prácticamente desaparecida, y el tercer tramo,
de unos 240 metros de longitud, se sitúa a pocos metros del primero, siendo su
cauce natural.
En los dos últimos tramos, las aguas
que antes recorría por ellos han desaparecido prácticamente y el espacio ha
sido ocupado por grandes estructuras de zarzamora, que pueden alcanzar hasta
los 4 metros de altura e incluso dominar todo el lecho del antiguo río.
Las obras y actuaciones han consistido
en eliminación de cañas, zarzas y otras herbáceas; podas, cortas y eliminación
de especies exóticas; retirada de escombros y restos vegetales; estabilización
de taludes y plantaciones y densificaciones con especies autóctonas (alisos,
fresnos, chopos y sauces).
Con ello, se pretende reducir las
frecuentes inundaciones al tiempo que se facilita la evacuación de agua en
época de crecidas.
En las actuaciones se complementaron
obras de mejora para la fauna mediante la creación de zonas de refugio tanto
dentro del cauce como en sus orillas; así mismo, se colocaron cajas nido para
favorecer el refugio de la avifauna.
El proyecto RICOVER es un programa
Interreg, dotado con 1,3 millones de euros procedentes de la Unión Europea, que
tiene por objetivo definir y realizar, a través de intervenciones piloto,
estrategias y metodologías conjuntas de bioingeniería para la protección y
conservación de los ríos de este espacio europeo.
España que participa con Portugal en el
mismo marco, realizarán otras actuaciones similares en el río Ter, Cataluña y
en Odelouca, Algarve. EFE
El río Guadajira es un río
afluente del Guadiana en Extremadura. Es conocido coloquialmente en la comarca
como Rivera de Guadajira.Nace en diversas fuentes de las Sierras de Feria,
discurre junto a los pueblos de Feria, Villalba de los Barros, Solana de los
Barros y Guadajira, entidad menor de Lobón, hasta su desembocadura en el río Guadiana.
Según la Confederación de la cuenca hidrográfica del Guadiana tiene una
longitud de 73,54 kilómetros, su cuenca ocupa una superficie de 895,94
kilómetros cuadrados, y recibe unas aportaciones naturales de 41,91 hectómetros
cúbicos.