¿Antisistemas?
He de reconocer que tiene todas mis simpatías el grupo de personas que durante estos últimos días se han establecido en las distintas plazas de las ciudades más importantes de España. Es difícil hacer un pronóstico de los resultados de un movimiento ciudadano que ha cogido totalmente desprevenidos a los políticos, que no podían imaginar la posibilidad de unión de la ciudadanía harta de los atropellos a los que nos tienen acostumbrados los políticos. El milagro lo ha podido hacer internet una vez más, que es hoy por hoy de las pocas cosas que no han conseguido manejar a su antojo los distintos grupos políticos. La mayor parte de la gente que se ha congregado allí son de lo más normal, de esos que tenemos de vecinos en nuestras casas. En muchos casos son jóvenes con titulación que han visto como la mentira que se les ha ido contando de “estudia, sácate una carrera, luego un master, maneja idiomas” no les ha hecho mejorar en la vida y que en muchos casos como mucho les ha servido para servir puerilmente como becarios sacando las castañas de muchos de sus superiores subidos en el escalafón por obra y gracia del compadreo que tanto se estila aquí en España. El hecho de ser gente cualificada les ha permitido llegar a un grado de organización impensable para un grupo tan numeroso de personas lo que les está permitiendo avanzar en el tiempo sin que los partidos políticos mayoritarios (unidos esta vez por destrozar una causa que les puede poner un poco de freno a sus desmanes) consigan encontrar la manera de frenar lo que verdaderamente es una bola de nieve rodando ladera abajo. El gobierno Intentó levantar el campamento aduciendo que había que limpiar la zona y ellos mismos organizaron cuadrillas de limpieza con lo cual desmontaron el engaño. Posteriormente han ido dando forma al día a día y han ido solucionando los distintos problemas que cualquier evento con este número de personas puede crear en las personas que allí están. El poder que han tomado ha sido de tal calibre que se han pasado por el forro la prohibición de “manifestarse” en la jornada de reflexión, que es un día que nos damos todos para descongestionarnos de tanta promesa por incumplir y que especialmente se toman los políticos poco acostumbrados que están a trabajar en algo que vaya más allá de la semana. Es cierto que después de la sentencia del constitucional sobre los proetarras de Bildu tumbando una sentencia anterior del Supremo, la justicia (controlada por el poder político) tiene tanta credibilidad como los propios políticos. Antes o después tendrán que levantar el campamento entre otras razones por el daño que involuntariamente se le está haciendo a los negocios que están establecidos en la Puerta del Sol. Son muchas las propuestas que se están analizando y seguramente muchas caigan en saco roto, pero este inicio les supone a los políticos y toda su cohorte de adláteres un aviso de que o espabilan, o les van a venir de aquí en adelante muchos 15-M. Ya hay otros países en los que muchos ciudadanos se solidarizan con los acampados en las distintas plazas. De todas las ideas que se están debatiendo, una de ellas hay algo que me gustaría que tirara para adelante. Es el de la elección por listas abiertas aunque ese, es un hueso duro de roer ya que es el que facilita que chorizos e inútiles se refugien en el paraguas de los partidos políticos.
He de reconocer que tiene todas mis simpatías el grupo de personas que durante estos últimos días se han establecido en las distintas plazas de las ciudades más importantes de España. Es difícil hacer un pronóstico de los resultados de un movimiento ciudadano que ha cogido totalmente desprevenidos a los políticos, que no podían imaginar la posibilidad de unión de la ciudadanía harta de los atropellos a los que nos tienen acostumbrados los políticos. El milagro lo ha podido hacer internet una vez más, que es hoy por hoy de las pocas cosas que no han conseguido manejar a su antojo los distintos grupos políticos. La mayor parte de la gente que se ha congregado allí son de lo más normal, de esos que tenemos de vecinos en nuestras casas. En muchos casos son jóvenes con titulación que han visto como la mentira que se les ha ido contando de “estudia, sácate una carrera, luego un master, maneja idiomas” no les ha hecho mejorar en la vida y que en muchos casos como mucho les ha servido para servir puerilmente como becarios sacando las castañas de muchos de sus superiores subidos en el escalafón por obra y gracia del compadreo que tanto se estila aquí en España. El hecho de ser gente cualificada les ha permitido llegar a un grado de organización impensable para un grupo tan numeroso de personas lo que les está permitiendo avanzar en el tiempo sin que los partidos políticos mayoritarios (unidos esta vez por destrozar una causa que les puede poner un poco de freno a sus desmanes) consigan encontrar la manera de frenar lo que verdaderamente es una bola de nieve rodando ladera abajo. El gobierno Intentó levantar el campamento aduciendo que había que limpiar la zona y ellos mismos organizaron cuadrillas de limpieza con lo cual desmontaron el engaño. Posteriormente han ido dando forma al día a día y han ido solucionando los distintos problemas que cualquier evento con este número de personas puede crear en las personas que allí están. El poder que han tomado ha sido de tal calibre que se han pasado por el forro la prohibición de “manifestarse” en la jornada de reflexión, que es un día que nos damos todos para descongestionarnos de tanta promesa por incumplir y que especialmente se toman los políticos poco acostumbrados que están a trabajar en algo que vaya más allá de la semana. Es cierto que después de la sentencia del constitucional sobre los proetarras de Bildu tumbando una sentencia anterior del Supremo, la justicia (controlada por el poder político) tiene tanta credibilidad como los propios políticos. Antes o después tendrán que levantar el campamento entre otras razones por el daño que involuntariamente se le está haciendo a los negocios que están establecidos en la Puerta del Sol. Son muchas las propuestas que se están analizando y seguramente muchas caigan en saco roto, pero este inicio les supone a los políticos y toda su cohorte de adláteres un aviso de que o espabilan, o les van a venir de aquí en adelante muchos 15-M. Ya hay otros países en los que muchos ciudadanos se solidarizan con los acampados en las distintas plazas. De todas las ideas que se están debatiendo, una de ellas hay algo que me gustaría que tirara para adelante. Es el de la elección por listas abiertas aunque ese, es un hueso duro de roer ya que es el que facilita que chorizos e inútiles se refugien en el paraguas de los partidos políticos.




















