La montijana Ramona Morán acaba de cumplir 100 años. Un cumpleaños que ha celebrado junto a su familia en la Residencia El Valle, acompañados también por los cuidadores del centro, compañeros de Residencia y por el alcalde de Montijo, Javier Cienfuegos, la concejala de Servicios Sociales, Sanidad e Igualdad, Eva de la Sal.

Daniel Germán, de la web Extremeños Centenarios, nos comparte un poquito de la vida de Ramona:

Ramona Morán Fernández nació en Montijo el 8 de mayo de 1925, en la calle Condes de Montijo, número 59, en el seno de una familia labradora. Es hija de Cirilo Morán y de Juana Fernández, quienes se dedicaban a las labores del campo, ya que tenían tierras en el camino viejo de Barbaño. Tuvo cinco hermanos: Francisco, Juan Manuel, Salustiano, Ramona y Bartolomé, de los cuales solo viven ella y Bartolomé, que actualmente tiene 90 años.

Ramona cuenta que su madre falleció cuando ella era muy joven, quedando huérfanos de madre siendo muy pequeños. En ese momento, Francisco, el mayor de los hermanos, tenía tan sólo 14 años. Gracias a su abuela María Menayo Gragera, que se hizo cargo de ellos, pudieron salir adelante. Recuerda que su abuela le enseñó a hacer las tareas del hogar, también tenía que lavar las verduras que su padre cultivaban en la huerta que a día de hoy conservan, que luego llevaban a vender a la Plaza de España de Montijo.

Tuvo una infancia dura, y desde pequeña tuvo que trabajar para ayudar en casa. Durante la guerra civil, los portugueses vendían el pan negro, y ella, mediante trueques, lo adquiría, lo que necesitaban, ya que en casa tenían animales en la huerta: vacas, cerdos, gallinas, etc.

En 1947, a los 23 años, se casó con Miguel Serrano Sánchez, quien era encofrador de oficio Tuvieron cinco hijos, (uno de ellos no llegó a nacer). Sus hijos son: Juana Serrano Morán, Alfonso Serrano Morán, Guadalupe Serrano Morán y Miguel Serrano Morán. La primera nació en la calle de Arcos, y los demás en la calle Donoso Cortes número 23. Más tarde se establecieron en la calle Vasco Núñez de Balboa número 42. Actualmente tiene 10 nietos y 13 bisnietos, y que la quieren muchísimo ya que es la reina de la familia.

Cuando se mudaron a la calle Vasco Núñez de Balboa, al cabo del tiempo, tuvieron que marcharse a Cataluña porque sus hijos querían encontrar trabajo. Se trasladaron a Mataró, donde su marido Miguel, pudo trabajar de su profesión como encofrador y una de las obras más importantes que recuerdan, es el puerto de Barcelona. Sus hijos varones trabajaron en el ayuntamiento, y sus hijas en el sector textil hasta la jubilación. Actualmente, tres de sus hijos viven allí y Juana, la mayor, vive en Montijo, donde montaron un bar.

Ramona enviudó en 2003, cuando Miguel falleció a los 84 años, ella estuvo durante mucho tiempo viviendo con sus hijos entre Mataró y Montijo.

Siempre ha sido una mujer fuerte, con una memoria prodigiosa. A pesar de que ya no puede caminar, tiene mucha fuerza y buena entereza, hace poco se recuperó de una dolencia grave casi de un día para otro, tras esto, habla muy bajo pero eso no impide que pueda contarte todo con muchos detalles de su larga vida.

Actualmente reside en la residencia “El Valle”, donde la cuidan y miman con mucho cariño. Allí se encuentra muy tranquila, y sobretodo feliz, pues está muy agradecida por las visitas diarias de sus hijos. La sacan de paseo mientras hablan con ella cada día, le gusta mucho salir a la calle y dar paseos, la pasada Semana Santa quiso ir a ver los pasos sin importar su reducida movilidad y la recuperación de su última dolencia, sus hijos se sintieron orgullosos de su madre y la llevaron, pues quedó muy contenta de volver a vivir la semana santa de Montijo.

¡FELICIDADES, RAMONA!