Francisco Marín Gómez, pintor y dibujante
Paco es un conocido y apreciado montijano debido a su trabajo y a las aficiones que practica y también como consecuencia de su procedencia, ya que su familia es eminentemente de Montijo.
Le faltaron algunas asignaturas para concluir sus estudios de Magisterio, carrera que no terminó porque sustituyó a su hermano Antonio en su trabajo de auxiliar en Correos. Era el año 1965 cuando entró de interino en Correos hasta que en 1968 aprobó las oposiciones en Madrid, permaneciendo en Montijo hasta su jubilación en el cargo de Jefe Adjunto.
En su juventud perteneció al Frente de Juventudes y, posteriormente, a la OJE.
Fue miembro fundador de la extinta Coral de Montijo.
Entre las grandes aficiones, que practica de forma autodidacta desde niño, se encuentran las de pintar y dibujar.
También le gusta escribir poemas y, como pasatiempo, realiza los más variados objetos en bricolaje.
“Siempre con quehaceres para no incurrir en el aburrimiento” y, cuando le queda tiempo, … toca el piano.
¿Puede presentarse?
Mi nombre es Francisco Marín Gómez, pero todos me conocéis como Paco Marín. Soy hijo de Antonio, maestro de obras y de Catalina, ama de casa, los dos de Montijo. Hemos sido seis hermanos y, actualmente, somos cinco por la pérdida de nuestro hermano Antonio en 2020.
Nací en Montijo, estoy casado con Olalla y tenemos dos hijos, Paco y María, y 4 nietos. Me casé con mi mujer el 01 de agosto de 1973.
Sus primeros colegios…
Mi primer colegio infantil fue en la Plaza del Barrio que lo regentaba Doña Antonia Huerta, luego pasé al Padre Manjón (ahora Casa de la Cultura), siendo mis profesores Don Pablo, Don Ramón, Dan Antonio y Don Pedro. En este colegio dábamos clases particulares y así saqué el título de Bachillerato. Posteriormente pasé a estudiar Magisterio, en la Academia de Don Tomás Rodas.
Recuerdos infantiles…
El recuerdo infantil inolvidable fue cuando, a los cinco años, me detectan un Perthe, (falta de riego sanguíneo en la cabeza del fémur de la pierna derecha), como consecuencia, estuve escayolado 15 meses, para un niño de esa edad, fue una experiencia imborrable.
¿Cómo pasó su infancia?
Mi infancia, fue como la de todos los niños de esa edad. Nos entreteníamos jugando en la calle con los amigos de los alrededores (entera, policía y ladrones, voy mosca, la billarda, el repión, etc.). Jugábamos al fútbol con pelotas de goma en las calles, salvando muchos obstáculos, incluido, la policía municipal porque si te cogían te quedabas sin el balón.
¿Que estudió?
Como dije anteriormente, además del bachillerato, estuve estudiando Magisterio hasta 3º, teniendo pendientes de aprobar, dos asignaturas de 2º y tres de 3º, y ahí se acabó mi periplo de ser maestro, por el motivo que aclararé más adelante.
¿Cómo recuerda su juventud?
Mi juventud, fue en la época dorada de los años 60 y 70, que para mí no creo que exista otro periodo de tiempo con más alicientes para los jóvenes: bailes, guateques, cines, conciertos y un amplio repertorio de diversiones. En este tiempo conocí el amor con la que actualmente es mi esposa.
¿Perteneció al Frente de Juventudes en su época?
Una forma de divertirnos con muchas actividades era en el Frente de Juventudes, que luego pasó a llamarse O.J.E. (Organización Juvenil Española). No hacía falta estar afiliado, allí se admitía a todo el mundo. Las actividades que recuerdo son: Ping-Pong, ajedrez, billar, rondalla, armónica (grupo al que pertenecí), teatro y una coral polifónica dirigida por Paco Rubio.
¿Qué otras actividades han practicado?
Siempre me ha gustado el bricolaje. Ha sido otro de mis pasatiempos, con la premisa de decir: Eso me atrevo a hacerlo yo. Desde tapizar las cajas de puros de telas, hasta hacer bastones ensamblando diversas clases de madera con cuernas de venados, hasta hacer las bastoneras para colocarlos. De las cajas de madera de vinos hago pequeños baúles tapizados, utilizados para costureros, guardar objetos personales, pequeñas herramientas, ...
Y, en otro orden de cosas, también me gusta escribir.
Tengo escritos algunos poemas, siempre dedicados a diversas anécdotas ocurridas en mi entorno o dedicados a alguien con todo mi cariño.
He tratado con estos quehaceres de no aburrirme jamás. No puedo estar parado, “hombre parado, mal pensamiento”.
Trabajó en Correos. ¿Cuándo ingresa?
Ingresé en Correos como interino en el año 1965, de auxiliar sustituyendo a mi hermano Antonio, con la idea de mi padre de guardarle la plaza, porque tenía que cumplir el Servicio Militar. Mi hermano se preparó para cartero en la mili y aprobó. Yo fui preparándome para las oposiciones de Auxiliar, aprobando la plaza vacante en Montijo, después de tres exámenes en Madrid (Mecanografía, Geografía de España e Internacional y Legislación de Correos) en 1968, pasando a ser parte de la plantilla de Correos, hasta mi jubilación. Supuso para mí ser funcionario del Estado y labrarme un porvenir para toda la vida.
¿Dónde estaba ubicada la primera oficina de Correos?
Para los que se acuerden, Correos estaba en la Calle Ramón y Cajal, donde está ahora el comercio de Horacio. Había dos ventanillas, una la regentaba el jefe y la otra yo. Cuando Correos y Telégrafos, se fusionaron pasamos a compartir las poquitas dependencias que existían ya que era una casa antigua sin comodidades y en la que vivía el jefe de Correos con su familia. Como consecuencia de la fusión, la plantilla aumentó y las oficinas, la cartería y demás dependencias se trasladaron al edifico actual, en la calle San Antonio.
¿Llega a pertenecer al Cuerpo Ejecutivo de Correos?
Sí, como consecuencia de los años de servicios, pasé a ser del Cuerpo Ejecutivo de Correos.
Cuando falleció el jefe de Correos lo sustituyó, como tal, el jefe de Telégrafos y yo paso a ser el jefe Adjunto.
¿En qué consistía principalmente su trabajo?
Mi trabajo consistía en atender al público en las ventanillas (Caja Postal, giros postales, certificados, venta de sellos a 80 céntimos de peseta, paquetería…) y al juntarnos los dos organismos tuvimos que aprender los de Correos funciones de Telégrafos y viceversa.
Nos hacían inspecciones anuales, tanto provinciales como de Madrid, y, gracias a nuestro bien hacer, cuando terminaban, nos felicitaban por el perfecto funcionamiento de la Estafeta, que es como se le denominaba a las poblaciones con oficinas propias.
¿Se usaba uniforme?
Usábamos una chaqueta color azul marino con anagramas del escudo de España y el de Correos, que era y es una cornamusa que se asemejaba a una trompeta.
¿Qué jornada laboral tenían?
En aquellos años, se abría la ventanilla los domingos y días de fiesta, y los carteros hacían dos repartos diarios, de mañana y tarde. Por Semana Santa teníamos que ver las procesiones asomados a la ventana de la oficina que daba a la calle.
¿De Caja Postal a BBVA?
Tiene una importancia tremenda, ya que los funcionarios de las oficinas de Correos de toda España fuimos los que soportamos el peso con nuestro esfuerzo para que la Caja Postal se convirtiera en la 2ª Caja de Ahorros más importante de España, sin obtener nada a cambio. Luego pasó a llamarse Argentaria, y al final la absorbió el Banco Bilbao Vizcaya, actual BBVA.
¿Otras aficiones?
Aparte del dibujo y la pintura, desde pequeño he tenido siempre mucha afición por la música, habiendo pertenecido a distintas agrupaciones musicales.
En la O.J.E. pertenecí a un grupo que tocábamos la armónica y actualmente la sigo tocando.
¿Toca el piano?
Tengo un piano de pared que lo toco de vez en cuando, un xilófono, todo de manera autodidacta, igual que la pintura, sin saber solfeo, tocando de oído.
Tengo muchas canciones preferidas que sería muy difícil nombrarlas todas, pero se basan todas en los años 60 y 70, algunas me atrevo a entonarlas de vez en cuando.
También formó parte de la Coral de Montijo…
Sí, fui miembro fundador de la Coral de Montijo, cuando la dirigía Don Pedro Grajera Gómez, sacerdote. Pertenecía a la voz baja. La coral después de haber pasado por distintas etapas y distintos directores, actualmente no existe, es una pena, porque era digna de escuchar. Cuando se cantó por primera vez en el Teatro Romano de Mérida el Himno de Extremadura, cuyo autor fue Miguel del Barco Gallego, allí estuvo nuestra coral, junto con otras corales extremeñas, cantando al unísono por primera vez nuestro himno. Fuimos obsequiadas todas las corales con un gran banquete por la Junta de Extremadura que presidía Juan Carlos Rodríguez Ibarra.
¿Realizó muchos viajes?
Con la coral visitamos muchos lugares como: Viena, Festival de Habaneras de Torrevieja, Totana, teatros, certámenes y concursos de corales, por supuesto, requería mucho sacrificio y prestarle mucha atención a los ensayos. El requisito para pertenecer a la coral era tener buen oído y gustarle a uno la música. Había componentes que sabían solfeo.
¿Cómo le gustaría que le definieran?
Me gustaría que me definieran como un pintor y dibujante que, a base de tesón y sacrificio, cuajó una etapa de su vida, haciendo una de las aficiones que más me apasionaron desde que tuve uso de razón. En el colegio Padre Manjón, Don Pedro Fuentes, uno de mis profesores, me sacaba al encerado a dibujar con tiza las figuras de los evangelios que se daban semanalmente en las clases de religión.
¿Ha recibió alguna formación pictórica?
No he tenido ningún profesor de dibujo y pintura nunca. Desde que empezabas las clases de primaria, y sobre todo en Bachillerato y Magisterio, tenía la asignatura de Dibujo, tanto lineal como artístico, cosa que continúo practicando por entretenimiento sin ánimo de lucro, pero que si alguien está interesado en alguna de mis láminas, llegaríamos a entendernos.
¿Qué temáticas y técnicas usa en su pintura?
Como habéis podido comprobar los que habéis visto bien la exposición o por internet, las temáticas son variadas: rostros de políticos, actores, perfiles, paisajes, personajes de dibujos animados, etc. En cuanto a las pinturas al óleo, también variadas destaco el retrato que le tengo a mi madre cuando tenía veinte años, pintado de una fotografía de su época.
¿Expone habitualmente su obra?
Únicamente he expuesto una vez en la Sala Centinela, animado por mis familiares para que lo hiciera. Me han ofrecido exponer en la Fundación Caja Badajoz, pero esto requiere mucho trabajo, al tener que desplazarme todos los días al lugar donde se monten las obras.
Agradezco a todos los que habéis asistido a contemplar los oleos y carboncillos, y, espero que os hallan gustado. Gracias, gracias y mil veces gracias.
NOMBRE: Francisco Marín Gómez.
NACIMIENTO: Montijo.
ESTADO CIVIL: Casado.
RESIDENCIA: Montijo.
UNA COMPAÑÍA: Mi familia.
UN LUGAR PARA VIVIR: Montijo.
UN LUGAR PARA PERDERSE: Cualquier sitio de Extremadura.
UNA LECTURA: Libros de historia.
UNA MÚSICA: Todo lo que sea agradable al oído, preferiblemente de los años 60 y 70.
UN HOBBY: La pesca y el fútbol.
UN SUEÑO: Que se acaben las guerras.
Paco es un conocido y apreciado montijano debido a su trabajo y a las aficiones que practica y también como consecuencia de su procedencia, ya que su familia es eminentemente de Montijo.
Le faltaron algunas asignaturas para concluir sus estudios de Magisterio, carrera que no terminó porque sustituyó a su hermano Antonio en su trabajo de auxiliar en Correos. Era el año 1965 cuando entró de interino en Correos hasta que en 1968 aprobó las oposiciones en Madrid, permaneciendo en Montijo hasta su jubilación en el cargo de Jefe Adjunto.
En su juventud perteneció al Frente de Juventudes y, posteriormente, a la OJE.
Fue miembro fundador de la extinta Coral de Montijo.
Entre las grandes aficiones, que practica de forma autodidacta desde niño, se encuentran las de pintar y dibujar.
También le gusta escribir poemas y, como pasatiempo, realiza los más variados objetos en bricolaje.
“Siempre con quehaceres para no incurrir en el aburrimiento” y, cuando le queda tiempo, … toca el piano.
¿Puede presentarse?
Mi nombre es Francisco Marín Gómez, pero todos me conocéis como Paco Marín. Soy hijo de Antonio, maestro de obras y de Catalina, ama de casa, los dos de Montijo. Hemos sido seis hermanos y, actualmente, somos cinco por la pérdida de nuestro hermano Antonio en 2020.
Nací en Montijo, estoy casado con Olalla y tenemos dos hijos, Paco y María, y 4 nietos. Me casé con mi mujer el 01 de agosto de 1973.
Sus primeros colegios…
Mi primer colegio infantil fue en la Plaza del Barrio que lo regentaba Doña Antonia Huerta, luego pasé al Padre Manjón (ahora Casa de la Cultura), siendo mis profesores Don Pablo, Don Ramón, Dan Antonio y Don Pedro. En este colegio dábamos clases particulares y así saqué el título de Bachillerato. Posteriormente pasé a estudiar Magisterio, en la Academia de Don Tomás Rodas.
Recuerdos infantiles…
El recuerdo infantil inolvidable fue cuando, a los cinco años, me detectan un Perthe, (falta de riego sanguíneo en la cabeza del fémur de la pierna derecha), como consecuencia, estuve escayolado 15 meses, para un niño de esa edad, fue una experiencia imborrable.
¿Cómo pasó su infancia?
Mi infancia, fue como la de todos los niños de esa edad. Nos entreteníamos jugando en la calle con los amigos de los alrededores (entera, policía y ladrones, voy mosca, la billarda, el repión, etc.). Jugábamos al fútbol con pelotas de goma en las calles, salvando muchos obstáculos, incluido, la policía municipal porque si te cogían te quedabas sin el balón.
¿Que estudió?
Como dije anteriormente, además del bachillerato, estuve estudiando Magisterio hasta 3º, teniendo pendientes de aprobar, dos asignaturas de 2º y tres de 3º, y ahí se acabó mi periplo de ser maestro, por el motivo que aclararé más adelante.
¿Cómo recuerda su juventud?
Mi juventud, fue en la época dorada de los años 60 y 70, que para mí no creo que exista otro periodo de tiempo con más alicientes para los jóvenes: bailes, guateques, cines, conciertos y un amplio repertorio de diversiones. En este tiempo conocí el amor con la que actualmente es mi esposa.
¿Perteneció al Frente de Juventudes en su época?
Una forma de divertirnos con muchas actividades era en el Frente de Juventudes, que luego pasó a llamarse O.J.E. (Organización Juvenil Española). No hacía falta estar afiliado, allí se admitía a todo el mundo. Las actividades que recuerdo son: Ping-Pong, ajedrez, billar, rondalla, armónica (grupo al que pertenecí), teatro y una coral polifónica dirigida por Paco Rubio.
¿Qué otras actividades han practicado?
Siempre me ha gustado el bricolaje. Ha sido otro de mis pasatiempos, con la premisa de decir: Eso me atrevo a hacerlo yo. Desde tapizar las cajas de puros de telas, hasta hacer bastones ensamblando diversas clases de madera con cuernas de venados, hasta hacer las bastoneras para colocarlos. De las cajas de madera de vinos hago pequeños baúles tapizados, utilizados para costureros, guardar objetos personales, pequeñas herramientas, ...
Y, en otro orden de cosas, también me gusta escribir.
Tengo escritos algunos poemas, siempre dedicados a diversas anécdotas ocurridas en mi entorno o dedicados a alguien con todo mi cariño.
He tratado con estos quehaceres de no aburrirme jamás. No puedo estar parado, “hombre parado, mal pensamiento”.
Trabajó en Correos. ¿Cuándo ingresa?
Ingresé en Correos como interino en el año 1965, de auxiliar sustituyendo a mi hermano Antonio, con la idea de mi padre de guardarle la plaza, porque tenía que cumplir el Servicio Militar. Mi hermano se preparó para cartero en la mili y aprobó. Yo fui preparándome para las oposiciones de Auxiliar, aprobando la plaza vacante en Montijo, después de tres exámenes en Madrid (Mecanografía, Geografía de España e Internacional y Legislación de Correos) en 1968, pasando a ser parte de la plantilla de Correos, hasta mi jubilación. Supuso para mí ser funcionario del Estado y labrarme un porvenir para toda la vida.
¿Dónde estaba ubicada la primera oficina de Correos?
Para los que se acuerden, Correos estaba en la Calle Ramón y Cajal, donde está ahora el comercio de Horacio. Había dos ventanillas, una la regentaba el jefe y la otra yo. Cuando Correos y Telégrafos, se fusionaron pasamos a compartir las poquitas dependencias que existían ya que era una casa antigua sin comodidades y en la que vivía el jefe de Correos con su familia. Como consecuencia de la fusión, la plantilla aumentó y las oficinas, la cartería y demás dependencias se trasladaron al edifico actual, en la calle San Antonio.
¿Llega a pertenecer al Cuerpo Ejecutivo de Correos?
Sí, como consecuencia de los años de servicios, pasé a ser del Cuerpo Ejecutivo de Correos.
Cuando falleció el jefe de Correos lo sustituyó, como tal, el jefe de Telégrafos y yo paso a ser el jefe Adjunto.
¿En qué consistía principalmente su trabajo?
Mi trabajo consistía en atender al público en las ventanillas (Caja Postal, giros postales, certificados, venta de sellos a 80 céntimos de peseta, paquetería…) y al juntarnos los dos organismos tuvimos que aprender los de Correos funciones de Telégrafos y viceversa.
Nos hacían inspecciones anuales, tanto provinciales como de Madrid, y, gracias a nuestro bien hacer, cuando terminaban, nos felicitaban por el perfecto funcionamiento de la Estafeta, que es como se le denominaba a las poblaciones con oficinas propias.
¿Se usaba uniforme?
Usábamos una chaqueta color azul marino con anagramas del escudo de España y el de Correos, que era y es una cornamusa que se asemejaba a una trompeta.
¿Qué jornada laboral tenían?
En aquellos años, se abría la ventanilla los domingos y días de fiesta, y los carteros hacían dos repartos diarios, de mañana y tarde. Por Semana Santa teníamos que ver las procesiones asomados a la ventana de la oficina que daba a la calle.
¿De Caja Postal a BBVA?
Tiene una importancia tremenda, ya que los funcionarios de las oficinas de Correos de toda España fuimos los que soportamos el peso con nuestro esfuerzo para que la Caja Postal se convirtiera en la 2ª Caja de Ahorros más importante de España, sin obtener nada a cambio. Luego pasó a llamarse Argentaria, y al final la absorbió el Banco Bilbao Vizcaya, actual BBVA.
¿Otras aficiones?
Aparte del dibujo y la pintura, desde pequeño he tenido siempre mucha afición por la música, habiendo pertenecido a distintas agrupaciones musicales.
En la O.J.E. pertenecí a un grupo que tocábamos la armónica y actualmente la sigo tocando.
¿Toca el piano?
Tengo un piano de pared que lo toco de vez en cuando, un xilófono, todo de manera autodidacta, igual que la pintura, sin saber solfeo, tocando de oído.
Tengo muchas canciones preferidas que sería muy difícil nombrarlas todas, pero se basan todas en los años 60 y 70, algunas me atrevo a entonarlas de vez en cuando.
También formó parte de la Coral de Montijo…
Sí, fui miembro fundador de la Coral de Montijo, cuando la dirigía Don Pedro Grajera Gómez, sacerdote. Pertenecía a la voz baja. La coral después de haber pasado por distintas etapas y distintos directores, actualmente no existe, es una pena, porque era digna de escuchar. Cuando se cantó por primera vez en el Teatro Romano de Mérida el Himno de Extremadura, cuyo autor fue Miguel del Barco Gallego, allí estuvo nuestra coral, junto con otras corales extremeñas, cantando al unísono por primera vez nuestro himno. Fuimos obsequiadas todas las corales con un gran banquete por la Junta de Extremadura que presidía Juan Carlos Rodríguez Ibarra.
¿Realizó muchos viajes?
Con la coral visitamos muchos lugares como: Viena, Festival de Habaneras de Torrevieja, Totana, teatros, certámenes y concursos de corales, por supuesto, requería mucho sacrificio y prestarle mucha atención a los ensayos. El requisito para pertenecer a la coral era tener buen oído y gustarle a uno la música. Había componentes que sabían solfeo.
¿Cómo le gustaría que le definieran?
Me gustaría que me definieran como un pintor y dibujante que, a base de tesón y sacrificio, cuajó una etapa de su vida, haciendo una de las aficiones que más me apasionaron desde que tuve uso de razón. En el colegio Padre Manjón, Don Pedro Fuentes, uno de mis profesores, me sacaba al encerado a dibujar con tiza las figuras de los evangelios que se daban semanalmente en las clases de religión.
¿Ha recibió alguna formación pictórica?
No he tenido ningún profesor de dibujo y pintura nunca. Desde que empezabas las clases de primaria, y sobre todo en Bachillerato y Magisterio, tenía la asignatura de Dibujo, tanto lineal como artístico, cosa que continúo practicando por entretenimiento sin ánimo de lucro, pero que si alguien está interesado en alguna de mis láminas, llegaríamos a entendernos.
¿Qué temáticas y técnicas usa en su pintura?
Como habéis podido comprobar los que habéis visto bien la exposición o por internet, las temáticas son variadas: rostros de políticos, actores, perfiles, paisajes, personajes de dibujos animados, etc. En cuanto a las pinturas al óleo, también variadas destaco el retrato que le tengo a mi madre cuando tenía veinte años, pintado de una fotografía de su época.
¿Expone habitualmente su obra?
Únicamente he expuesto una vez en la Sala Centinela, animado por mis familiares para que lo hiciera. Me han ofrecido exponer en la Fundación Caja Badajoz, pero esto requiere mucho trabajo, al tener que desplazarme todos los días al lugar donde se monten las obras.
Agradezco a todos los que habéis asistido a contemplar los oleos y carboncillos, y, espero que os hallan gustado. Gracias, gracias y mil veces gracias.
NOMBRE: Francisco Marín Gómez.
NACIMIENTO: Montijo.
ESTADO CIVIL: Casado.
RESIDENCIA: Montijo.
UNA COMPAÑÍA: Mi familia.
UN LUGAR PARA VIVIR: Montijo.
UN LUGAR PARA PERDERSE: Cualquier sitio de Extremadura.
UNA LECTURA: Libros de historia.
UNA MÚSICA: Todo lo que sea agradable al oído, preferiblemente de los años 60 y 70.
UN HOBBY: La pesca y el fútbol.
UN SUEÑO: Que se acaben las guerras.