Esperanza para la tierra y para la humanidad
Los acontecimientos que están marcando los últimos tiempos nos muestran que existe una profunda relación entre la degradación ecológica que amenaza el presente y el futuro de la vida sobre el planeta, y la injusticia e inequidad estructural que relega a grandes masas humanas a la pobreza y exclusión. “No hay dos crisis separadas, una ambienta y otra social, sino una sola y compleja crisis socio-ambiental” (Laudato sí, 139), que vulnera permanentemente derechos humanos de personas, familias, comunidades y pueblos enteros.
Vivimos en un contexto social caracterizado por el descuido, la desconexión y desvinculación. Separamos al ser humano con la naturaleza, cuando estas relaciones son descuidadas, cuando la justica ya no habita la tierra, la Biblia nos dice que toda la vida está en peligro (Laudato sí 70).
Somos una familia humana con una Casa Común, un hogar del que todas las personas somos responsables y partícipes, pero no somos conscientes de su deterioro.
No somos conscientes del planeta que vamos a dejar a quienes nos sucedan. Nuestra fe como como cristianos nos ofrece entender que es un tema central en nuestro ser y estar como Iglesias, en nuestro compromiso con una sociedad más justa.
Los impactos de esta crisis socio-ambiental se dejan ver en todos los rincones de nuestra Casa Común, no solamente en lugares distantes, también en nuestra realidad más próxima podemos percibir sus heridas. Esta mirada ampliada nos ayuda a comprender que lo próximo y lo lejano están conectados.
Hemos de adoptar otro estilo de vida más austero en el ámbito personal, familiar y comunitario. Hacer cambios importantes en nuestra vida cotidiana y en nuestros hábitos de producción y consumo que contribuyan a disminuir los impactos de la crisis socio-ambiental.
En Cáritas también queremos asumir nuestro compromiso con la tierra y con los pueblos, con esta realidad porque entendemos que el cuidado de la Casa Común está relacionado estrechamente y de modo indisoluble con la defensa de los derechos humanos. Y lo hacemos sensibilizando, promoviendo y animando hacia cambios concretos en el estilo de vida de las personas y las comunidades, actuando juntos por el cuidado de la casa común.
Únete en el cuidado de la Casa Común
Te recordamos el tlf. de Cáritas Interparroquial de Montijo: 697 854 864.
Nºde cuenta (Caja Rural de Extremadura) ES52 3009 0021 7023 2472 1410.
Los acontecimientos que están marcando los últimos tiempos nos muestran que existe una profunda relación entre la degradación ecológica que amenaza el presente y el futuro de la vida sobre el planeta, y la injusticia e inequidad estructural que relega a grandes masas humanas a la pobreza y exclusión. “No hay dos crisis separadas, una ambienta y otra social, sino una sola y compleja crisis socio-ambiental” (Laudato sí, 139), que vulnera permanentemente derechos humanos de personas, familias, comunidades y pueblos enteros.
Vivimos en un contexto social caracterizado por el descuido, la desconexión y desvinculación. Separamos al ser humano con la naturaleza, cuando estas relaciones son descuidadas, cuando la justica ya no habita la tierra, la Biblia nos dice que toda la vida está en peligro (Laudato sí 70).
Somos una familia humana con una Casa Común, un hogar del que todas las personas somos responsables y partícipes, pero no somos conscientes de su deterioro.
No somos conscientes del planeta que vamos a dejar a quienes nos sucedan. Nuestra fe como como cristianos nos ofrece entender que es un tema central en nuestro ser y estar como Iglesias, en nuestro compromiso con una sociedad más justa.
Los impactos de esta crisis socio-ambiental se dejan ver en todos los rincones de nuestra Casa Común, no solamente en lugares distantes, también en nuestra realidad más próxima podemos percibir sus heridas. Esta mirada ampliada nos ayuda a comprender que lo próximo y lo lejano están conectados.
Hemos de adoptar otro estilo de vida más austero en el ámbito personal, familiar y comunitario. Hacer cambios importantes en nuestra vida cotidiana y en nuestros hábitos de producción y consumo que contribuyan a disminuir los impactos de la crisis socio-ambiental.
En Cáritas también queremos asumir nuestro compromiso con la tierra y con los pueblos, con esta realidad porque entendemos que el cuidado de la Casa Común está relacionado estrechamente y de modo indisoluble con la defensa de los derechos humanos. Y lo hacemos sensibilizando, promoviendo y animando hacia cambios concretos en el estilo de vida de las personas y las comunidades, actuando juntos por el cuidado de la casa común.
Únete en el cuidado de la Casa Común
Te recordamos el tlf. de Cáritas Interparroquial de Montijo: 697 854 864.
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