Una mala racha de 5 partidos consecutivos perdiendo, 4 de ellos, durante el mes de Abril, han hecho que el Montijo, afronte sus 2 últimos encuentros, ante Cacereño y Diocesano, respectivamente, con la necesidad de puntuar para salvar la categoría.

Lo mejor, que se depende de sí mismo, y que valdría con casi toda seguridad con 3 de los 6 puntos en juego.

El mes malo de por si en líneas generales, comenzó en el Emilio Macarro, con la derrota por 0 a 3 ante el Alcorcón B, en un mal partido de los rojinegros, aunque la derrota se antoje excesiva, pues dos de los 3 goles de los madrileños, fueron ya con el tiempo cumplido.

La mayor derrota, hasta la fecha, la cosecharía el Montijo, en su visita a Madrid, para enfrentarse al Navalcarnero. 5 a 0, fue el resultado final de un partido que mejor olvidar.

El siguiente de los encuentros, de nuevo en el Emilio Macarro, tenía el aliciente de recibir al líder de la competición, el Melila. El resultado final de 1 a 2, para los visitantes, no hizo justicia a lo vivido en el encuentro, pues fueron muchas las ocasiones marradas por los montijanos, ante un conjunto, el norteafricano, que por el contrario, se mostro muy eficaz de cara a gol.

La última de las derrotas, se alcanzó en tierras canarias, en su enfrentamiento con el Atlético Paso de la Isla de la Palma. El 2 a 0 final, fue un resultado demasiado doloroso, para los méritos contraídos por unos y otros, y que dejó muy tocado a las huestes de Marrero, que de nuevo no veían premiado su enorme esfuerzo y desgaste.

Abril, concluía en el Emilio Macarro, recibiendo la visita del C.F Villanovense, en un derbi con 2 equipos que aunque por objetivos diferentes necesitaban los 3 puntos cómo agua de mayo. Fue un muy buen derbi, muy vistoso y con ocasiones para unos y otros. Todos los goles, serian en el 2º tiempo. Yeray abría el marcador en el minuto 46, para los montijanos, que pudieron ampliar diferencias posteriormente. Sin embargo, un error defensivo en el minuto 88, permitía el empate de los serones, gracias a un gol en propia puerta de Javi Chino, en su intento de despejar el balón

Lejos de acusar el mazazo, y ya en el descuento,  Cristo remataría un balón suelto a despeje del cancerbero Lázaro, para hacer el 2 a 1 final, y hacer vibrar cómo nunca el Emilio Macarro ante una afición entregada.

La victoria que corta esa mala racha, sirve para coger aire, y afrontar con algo más de moral, los 2 choques que al equipo le restan por afrontar, y que dictaran sentencia del futuro del Montijo, en la 2ª RFEF.