Reformas reactivadoras
Los cambios de ciclo en España han empezado siempre en ayuntamientos y comunidades autónomas, por lo que las próximas elecciones de mayo pueden suponer el arranque y el punto de partida para que comience una nueva etapa y el cambio político que España necesita.
Frente a un Gobierno que maquilla las cifras del paro a cuenta del misterio de los fijos discontinuos, cuyo número total no desvela para ocultar que se destruye empleo, hay que mirarse en el ejemplo de las políticas que han funcionado como por ejemplo la reforma laboral de Fátima Báñez que bajo el Gobierno de Rajoy generó dos millones de puestos de trabajo. La clave no es dificultar más el sistema y ponerle más trabas, la clave es flexibilizar para que empresario y trabajador tengan opciones. Mientras el sanchismo se empecina permanentemente en enfrentar, dividir y buscar bloques, solamente haciendo un frente común es como podemos transformar la sociedad y dar un futuro mejor a España.
Las reformas son la tabla de salvación de nuestra economía porque nuestro país no puede permitirse el cierre de 215 empresas diarias y perder 20.000 autónomos al año. Hay poner el foco en activar la economía con una mayor productividad vía reformas ya que es insostenible tener más de tres millones de personas desempleadas y más desempleo que en el resto de Europa y al tiempo preguntarnos que está fallando cuando con más de un millón de personas más trabajando que en el año 2019, nuestra economía no se recupera.
Y peor que un Gobierno que maquilla es un Gobierno que desampara a sus ciudadanos. Los socialistas llegaron al Ejecutivo enarbolando la bandera de la protección de las mujeres y a los que han protegido es a los violadores y agresores sexuales a los que han puesto en la calle con su Ley del solo sí es sí. El Gobierno de Sánchez sigue sin asumir responsabilidades por la ley del sí es sí y sin ponerse de acuerdo para rectificarla, tras beneficiar a más de medio millar de agresores sexuales. Decían que llegaban para proteger a los españoles frente a la corrupción y a los que han protegido es a sus propios corruptos reformando la malversación.
Y lo más frustrante es que tenemos un Gobierno que se queda a medias ya que copió algunas de las propuestas del PP que han funcionado, pero se debe extender la rebaja del IVA a la carne, el pescado y las conservas y que apliquen un conjunto de medidas y reformas. Si dejas fuera de la cesta de la compra la carne y el pescado que son los elementos que más han subido, la economía no acaba de funcionar y seguirá siendo un problema por lo que la clave es arreglar la situación para no perder poder adquisitivo.
Los cambios de ciclo en España han empezado siempre en ayuntamientos y comunidades autónomas, por lo que las próximas elecciones de mayo pueden suponer el arranque y el punto de partida para que comience una nueva etapa y el cambio político que España necesita.
Frente a un Gobierno que maquilla las cifras del paro a cuenta del misterio de los fijos discontinuos, cuyo número total no desvela para ocultar que se destruye empleo, hay que mirarse en el ejemplo de las políticas que han funcionado como por ejemplo la reforma laboral de Fátima Báñez que bajo el Gobierno de Rajoy generó dos millones de puestos de trabajo. La clave no es dificultar más el sistema y ponerle más trabas, la clave es flexibilizar para que empresario y trabajador tengan opciones. Mientras el sanchismo se empecina permanentemente en enfrentar, dividir y buscar bloques, solamente haciendo un frente común es como podemos transformar la sociedad y dar un futuro mejor a España.
Las reformas son la tabla de salvación de nuestra economía porque nuestro país no puede permitirse el cierre de 215 empresas diarias y perder 20.000 autónomos al año. Hay poner el foco en activar la economía con una mayor productividad vía reformas ya que es insostenible tener más de tres millones de personas desempleadas y más desempleo que en el resto de Europa y al tiempo preguntarnos que está fallando cuando con más de un millón de personas más trabajando que en el año 2019, nuestra economía no se recupera.
Y peor que un Gobierno que maquilla es un Gobierno que desampara a sus ciudadanos. Los socialistas llegaron al Ejecutivo enarbolando la bandera de la protección de las mujeres y a los que han protegido es a los violadores y agresores sexuales a los que han puesto en la calle con su Ley del solo sí es sí. El Gobierno de Sánchez sigue sin asumir responsabilidades por la ley del sí es sí y sin ponerse de acuerdo para rectificarla, tras beneficiar a más de medio millar de agresores sexuales. Decían que llegaban para proteger a los españoles frente a la corrupción y a los que han protegido es a sus propios corruptos reformando la malversación.
Y lo más frustrante es que tenemos un Gobierno que se queda a medias ya que copió algunas de las propuestas del PP que han funcionado, pero se debe extender la rebaja del IVA a la carne, el pescado y las conservas y que apliquen un conjunto de medidas y reformas. Si dejas fuera de la cesta de la compra la carne y el pescado que son los elementos que más han subido, la economía no acaba de funcionar y seguirá siendo un problema por lo que la clave es arreglar la situación para no perder poder adquisitivo.