La carretera de los Pueblos Nuevos
El Mirador se asoma este mes a la carretera Ex-209. Su titularidad corresponde a la Junta de Extremadura con categoría inter comarcal. Transcurre desde Badajoz a Mérida por Montijo. Conocida popularmente por la carretera de los “Pueblos Nuevos”, pues son varios los pueblos construidos al amparo del Plan Badajoz que se benefician de ella como vía de comunicación. En su trayecto acceden las poblaciones de Gévora, Sagrajas, Novelda del Guadiana, Pueblonuevo del Guadiana, Guadiana, Valdelacalzada, Puebla de la Calzada, Montijo, Lácara, Torremayor, La Garrovilla, Esparragalejo y Mérida. Acudo a su historia.
Al camino de Montijo a Badajoz, en sus primeros tramos con el nombre de Carazo, le llegó la hora de convertirse en carretera para dar fácil salida y circulación de las fincas que lo cruzaban: Torre Fresno, La Rueda, Sarteneja, Pesquero, El Cincho y Sagrajas, entre otras. El promotor de la construcción de la carretera fue el VI Conde de la Torre del Fresno, Francisco Fernández Marquesta, Senador por la provincia de Badajoz en 1903-1910, que presentó ante la Cámara Alta, el 4 de noviembre de 1903, una Propuesta de Ley que fue aprobada para la construcción de la carretera. Proyectándose el enlace entre la de Badajoz-Alburquerque, entre los kilómetros seis y siete, pasando por la estación de ferrocarril de Talavera la Real, para finalizar en Puebla de la Calzada, buscando desde ella la estación de ferrocarril de Montijo. Enlazando, posteriormente, con la carretera de Montijo en dirección a Mérida. Carretera actual EX-209.
Fue el VI Conde de la Torre de Fresno un mecenas y benefactor de la ciudad de Badajoz. Construyó en 1911 el Parque Ascensión en la Avenida de Elvas. Su estructura romántica, incluye elementos medioambientales y arquitectónicos de relevancia. Francisco Fernández Marquesta, en 1917, cedió en usufructo de su finca Palomas, junto a la Cañada de Sancha Brava, para construir el primer campo de fútbol del Vivero que, a su muerte, en 1931, lo donó al Sport Badajoz del que formó parte de su Junta Directiva. Así mismo donó un edificio de su propiedad en la calle Ramón Albarrán para sede del antiguo Centro Obrero y luego Círculo Pacense. El Mayorazgo de la Torre del Fresno fue fundado por el Comendador Alonso de Cárdenas, I conde de la Puebla del Maestre, casado con Elvira de Figueroa, señora de Lobón, hija del II Conde de Feria, Gomes Suárez de Figueroa. Tras varias transmisiones la dehesa de Torre Fresno pasó a los hermanos Sancho y Alonso Gragera, hijos del capitán Toribio Mateo Gragera y Leonor Martín Gragera quienes vivieron en su hidalgo caserón de la calle Porras.
Padres e hijos unificaron en porciones las dehesas de Torre Fresno, Satisfolla de Hoces o de la Vara, Los Carneriles, Fresno Pinel, Fresno Carazo y Fresnillos, entre otras. Si bien, Sancho se quedó con la parte de Los Carneriles y Satisfolla, y Alonso con la Torre del Fresno. Hijo de Alonso fue Toribio Diego Gragera y Gragera Bérriz, al que el rey Fernando VI concedió el 15 de junio de 1747, el título de Conde de la Torre del Fresno. En el cortijo del Condado, que está junto a la antigua fábrica de Cobasa, está su escudo de armas. La dehesa del Condado de Torrefresno fue la segunda gran finca expropiada para Valdelacalzada dentro de la política del Plan Badajoz, cuando la propiedad recaía en Álvaro de Solar y familia, que consiguieron una reserva de trescientas hectáreas. Adquiriendo, en 1948, el Instituto Nacional de Colonización (INC) quinientas cuarenta y cuatro de secano por un valor de cuatro millones de pesetas, en las que se asentaron treinta y seis colonos. En verano, gracias al regadío, la Ex-209 es un reguero de maquinarias y vehículos que cosechan y transportan lo que la tierra da en su ciclo de vida.
El Mirador se asoma este mes a la carretera Ex-209. Su titularidad corresponde a la Junta de Extremadura con categoría inter comarcal. Transcurre desde Badajoz a Mérida por Montijo. Conocida popularmente por la carretera de los “Pueblos Nuevos”, pues son varios los pueblos construidos al amparo del Plan Badajoz que se benefician de ella como vía de comunicación. En su trayecto acceden las poblaciones de Gévora, Sagrajas, Novelda del Guadiana, Pueblonuevo del Guadiana, Guadiana, Valdelacalzada, Puebla de la Calzada, Montijo, Lácara, Torremayor, La Garrovilla, Esparragalejo y Mérida. Acudo a su historia.
Al camino de Montijo a Badajoz, en sus primeros tramos con el nombre de Carazo, le llegó la hora de convertirse en carretera para dar fácil salida y circulación de las fincas que lo cruzaban: Torre Fresno, La Rueda, Sarteneja, Pesquero, El Cincho y Sagrajas, entre otras. El promotor de la construcción de la carretera fue el VI Conde de la Torre del Fresno, Francisco Fernández Marquesta, Senador por la provincia de Badajoz en 1903-1910, que presentó ante la Cámara Alta, el 4 de noviembre de 1903, una Propuesta de Ley que fue aprobada para la construcción de la carretera. Proyectándose el enlace entre la de Badajoz-Alburquerque, entre los kilómetros seis y siete, pasando por la estación de ferrocarril de Talavera la Real, para finalizar en Puebla de la Calzada, buscando desde ella la estación de ferrocarril de Montijo. Enlazando, posteriormente, con la carretera de Montijo en dirección a Mérida. Carretera actual EX-209.
Fue el VI Conde de la Torre de Fresno un mecenas y benefactor de la ciudad de Badajoz. Construyó en 1911 el Parque Ascensión en la Avenida de Elvas. Su estructura romántica, incluye elementos medioambientales y arquitectónicos de relevancia. Francisco Fernández Marquesta, en 1917, cedió en usufructo de su finca Palomas, junto a la Cañada de Sancha Brava, para construir el primer campo de fútbol del Vivero que, a su muerte, en 1931, lo donó al Sport Badajoz del que formó parte de su Junta Directiva. Así mismo donó un edificio de su propiedad en la calle Ramón Albarrán para sede del antiguo Centro Obrero y luego Círculo Pacense. El Mayorazgo de la Torre del Fresno fue fundado por el Comendador Alonso de Cárdenas, I conde de la Puebla del Maestre, casado con Elvira de Figueroa, señora de Lobón, hija del II Conde de Feria, Gomes Suárez de Figueroa. Tras varias transmisiones la dehesa de Torre Fresno pasó a los hermanos Sancho y Alonso Gragera, hijos del capitán Toribio Mateo Gragera y Leonor Martín Gragera quienes vivieron en su hidalgo caserón de la calle Porras.
Padres e hijos unificaron en porciones las dehesas de Torre Fresno, Satisfolla de Hoces o de la Vara, Los Carneriles, Fresno Pinel, Fresno Carazo y Fresnillos, entre otras. Si bien, Sancho se quedó con la parte de Los Carneriles y Satisfolla, y Alonso con la Torre del Fresno. Hijo de Alonso fue Toribio Diego Gragera y Gragera Bérriz, al que el rey Fernando VI concedió el 15 de junio de 1747, el título de Conde de la Torre del Fresno. En el cortijo del Condado, que está junto a la antigua fábrica de Cobasa, está su escudo de armas. La dehesa del Condado de Torrefresno fue la segunda gran finca expropiada para Valdelacalzada dentro de la política del Plan Badajoz, cuando la propiedad recaía en Álvaro de Solar y familia, que consiguieron una reserva de trescientas hectáreas. Adquiriendo, en 1948, el Instituto Nacional de Colonización (INC) quinientas cuarenta y cuatro de secano por un valor de cuatro millones de pesetas, en las que se asentaron treinta y seis colonos. En verano, gracias al regadío, la Ex-209 es un reguero de maquinarias y vehículos que cosechan y transportan lo que la tierra da en su ciclo de vida.
