Lunes, 22 de Septiembre de 2025

Actualizada Viernes, 19 de Septiembre de 2025 a las 19:56:57 horas

Pedro Gutiérrez
Martes, 09 de Marzo de 2021 Actualizada Martes, 09 de Marzo de 2021 a las 12:25:13 horas

Música y resurgir

Cuando pasemos esta pandemia y recuperemos parte de lo perdido, nos chocaremos con la realidad. Y es que cuando se piensa en crisis económica de las empresas y de los gobiernos, lo último en lo que se le ocurre pensar a uno es en la música, las artes y la cultura. Los gobiernos centrales y regionales tienden a recortar en primer lugar las partidas destinadas a la cultura y las empresas reducen sus partidas para patrocinios y mecenazgo.
 Evidentemente aquellos que nos dedicamos a la música y a la cultura, enseguida denunciamos lo que nos parece un evidente atropello, pero hasta cierto punto se entiende que en un momento de urgencia mundial, en que la precariedad azota a tantas familias, se privilegien soluciones a corto y medio plazo y no inversiones a largo plazo, tal y como resulta (o debería resultar) a priori la cultura.
Más de uno se pregunta: y ¿Para qué sirve la cultura con la que está cayendo? ¿Puede una expresión cultural llegar a convertirse en un instrumento eficiente para superar este difícil momento? Después de varios años cuesta abajo, quizá sean muchos (¡demasiados!) y encima el COVID, no dejamos de escuchar que crisis es lo mismo que oportunidad y argumentos del estilo. Si uno está muy cansado de ese tipo de argumentos, es mala señal, porque precisamente lo único que nos puede sacar de esta situación es la actitud positiva y creativa. Pero esa predisposición no se fomenta por el simple voluntarismo de quien decide tenerla o por la mera insistencia de quien quiere que otros la desarrollen.
Está claro que la voluntad y la auto-motivación juegan un papel fundamental, pero en resumidas cuentas, después de unos persistentes malos resultados y sin claras perspectivas de mejora, má allá de la vacuna, se hace patente la imperiosa necesidad de una inspiración real que nos impulse.
Por otra parte es un hecho que esta crisis mundial no supone, salvo en casos muy excepcionales, ninguna oportunidad de negocio, pero sí un contexto único que nos obliga a adaptarnos, a desarrollar la creatividad y el liderazgo.”El hambre aguza el ingenio” dice el refrán popular. Ante el panorama actual, el español medio se debate interiormente entre la queja e indignación y el deseo de salir adelante. Ya no vale el “seguir-aguantando-agazapado” porque el panorama no augura cambios positivos inminentes, y hay que mirar a medio-largo plazo para aguantar el tipo.
¿Puede una expresión cultural llegar a convertirse en un instrumento eficiente para superar todo esto? La respuesta final quizá debiera dárnosla el poeta polaco Cyprian Norwid, quién dijo: “La belleza que proporciona el arte y la cultura sirve para entusiasmar e impregnar a la sociedad, y serán las raíces para en estos tiempos poder resurgir”.
No dejemos de confiar y seguir buscando la belleza en ellas... FELIZ PRIMAVERA

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.