Estimado don Francisco… le agradezco que desde la Capital se interese por las cosas que suceden por esta su tierra. Eso es prueba de la multiculturalidad de este Medio.

Créame, si tuviera que dedicarme a contestar una por una todas las preguntas que me plantea a modo de encuesta, le haríamos un flaco favor a este Periódico, porque no íbamos a acabar nunca. Pero como resulta que me lo pone usted muy fácil le diré que, ya en la segunda línea de su extensa carta, comete un error de bulto que descalifica el resto de lo que me pregunta, así que, con brevedad, le digo… Cuándo usted me pide la opinión sobre Marcelino Iglesias del que usted dice que es el Secretario General de MI PARTIDO… o cuando afirma que MI PARTIDO ha aprobado una Ley para prohibir fumar…, le contesto: Si tiene usted alguna constancia de que el que suscribe pertenece a algún partido político, DEMUÉSTRELO y si no, DISCÚLPESE. Se lo pido con toda la educación pero con la máxima firmeza. Porque mal empezamos, señor Aguirre.

No señor, no pertenezco a ningún Partido y, por si fuera de su interés le aclaro que, desde niño he mamado la opción de Izquierdas, pero considero que esta no es mi Izquierda ni me parece el señor Zapatero ninguna estrella que brille en el firmamento político. A partir de ahí, mis simpatías son hacia aquellos que considere oportuno, con el mismo derecho que usted tiene de simpatizar con quien quiera.

Por favor, señor Aguirre, solo faltaba que, a los que no estamos de acuerdo con, ¡OJO!, LAS TÁCTICAS del Partido Popular, y repito, LAS TÁCTICAS, nos marquen a fuego el DNI en el brazo para tenernos controlados. Como no creo que sea eso lo que usted quiere, vamos a entender los otros comentarios suyos como “lapsus interpretativos”. Le reconozco que estas cosas me sacan de quicio y que, posiblemente por ello, en alguna de mis críticas me he pasado de dureza, lo siento y me disculpo por ello.

Don Francisco, con toda educación le aseguro que, a mi, lo que usted pueda o no opinar sobre la actual situación y todos los ejemplos que quiera exponer, me dejan frío y ni me pican ni me duelen. Es su opinión y yo la respeto. Para compartirla, me harían falta más y más claros argumentos. Eso de… “y tu más”, no me vale, señor Aguirre. Porque claro, si llamamos dictador a quien dispone una Ley, la que sea, luego no podemos sorprendernos si, con los mismos argumentos que usted expone, los que pensamos de otra manera, las calificamos de insidiosas y de que ya vale. Ejemplo 1: llamar Dictador al Gobierno que aprueba la Ley antitabaco cuando tenemos a todo un Pueblo vigilado, o lo que sea, por varias cámaras que los vecinos no aceptan. Ejemplo 2: Buscar con lupa explicaciones de presuntas corrupciones en los demás, mientras en lo nuestro (¿le suena Gürtel?) ni explicamos, ni damos la cara ni nos importa que le cueste la carrera a un Juez como Baltasar Garzón. Ejemplo 3: Pasearse por el mundo con la vitola de ex Presidente como hace el señor Aznar, aconsejando no invertir en España. Estos tres simples ejemplos, entre otros, son hechos demostrables y no creo que usted los aplauda.

Señor Aguirre: todas y cada una de sus opiniones y preguntas, personal y honestamente me parecen una barbaridad. Esa es mi respuesta general a todo lo que usted me pide opinión. Inaceptable, que quede claro. Pero sería exigible mantener la misma presunción de inocencia que ustedes piden para el señor Camps… ¿o no?. Mire usted, don Francisco, yo también opino que esto, ni va ni pinta nada bien. Pero tengo otro argumento… no se puede andar vendiendo que este Gobierno es el autor de todos los desastres mundiales que se nos ocurran, cuando, la crisis que tenemos encima solo se debe a una política basada en el Turismo y en el Ladrillo. La prueba de que la crisis es mundial es que baja el Turismo. La gente tiene otras preferencias. La prueba del “ladrillazo” es la cantidad de viviendas sin vender que hay en el mercado.

Seamos honrados, señor Aguirre, esa política económica fue impulsada por el señor Aznar, siguiendo los consejos de Rodrigo Rato. Lo cómodo hoy es culpar a quien está herido o, si lo prefiere, hacer leña del árbol caído y opinar que, si estuviera gobernando el PP, este País sería una huelga constante y sonante. Pues muy bien, es su opinión. No creo que sea un crimen no compartirla. Por lo tanto, le agradecería que me apeara usted del tratamiento de “talante insultante”, por que no es así y usted lo sabe. Si no quisiera leer los epítetos que usted me dirige, simplemente no contestaría. Claro que acepto lo que usted tenga que decir pero, ni yo le obligo a que “comulgue” conmigo ni le acepto que me obligue usted a compartir sus opiniones. Hay algo que tengo muy claro… quien crea que en este deprimente desfile, solo yo llevo el paso bien y todos los demás se equivocan, comete un error de bulto. Si, entre todos, ajustáramos el paso, las cosas irían mejor, no lo dude. Históricamente, no ha habido un Gobierno en este País que haya tenido que atender a tanta zancadilla, como el actual.

Don Manuel, a mi los puros me levantan dolor de cabeza. Si no los fumo por esa razón, malamente me los van a meter por otro lado, ni creo que usted, en su caso, consienta que se lo hagan. Señor Aguirre, desde la discrepancia, un poquito de respeto, por favor.

Y como muy bien dice usted, hay tantas opiniones como personas. Por eso mismo, usted tiene las suyas y yo las mías. Le agradezco su ofrecimiento de seguir leyéndome y le aseguro que intentaré moderar mis comentarios para que nadie se sienta aludido. En lo que no voy a discrepar es que, a las 10 de la noche, es de noche y está oscuro. Lo demás, son ganas de discutir y en eso, no voy a entrar.

Los ciclos, señor Aguirre, llegan y pasan. A los humanos nos queda observar y aprender para no repetir lo negativo. En mi caso, tengo mas ganas que usted de que termine la crispación por la vía del diálogo, créame, pero expresado de la forma que ustedes lo hacen, es francamente difícil. La salvajada de Murcia es el mejor ejemplo de que, si unos no lo están haciendo bien, los otros no les van a la zaga.

Le deseo un muy feliz año 2011 y tranquilo, igual a ZP le da por convocar Elecciones anticipadas. Si así fuera, no le quede duda de que me gustaría celebrarlo con usted ante una buena cerveza bien fría. Un cordial saludo.