El Ayuntamiento de Lobón en los meses de julio y agosto organiza actividades de ocio y divertimento para los niños y niñas de la localidad.
Este año, aprovechando que se está desarrollando un programa de formación y empleo de Escuelas Profesionales de Extremadura, donde 15 alumnos y alumnas de Lobón y la cercana Guadajira están desarrollando trabajos de excavación en el yacimiento arqueológico del antiguo convento Franciscano de la orden de Santiago, han colaborado con esta iniciativa promovida desde dicha Entidad.
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Diecinueve niños en edades comprendidas entre 7 y 11 años experimentaron la sensación de sentirse arqueólogos por unas horas, ya que el alumnado de la Escuela Profesional “El Trampín” explicaron la historia de las ruinas del convento Franciscano de Santiago haciendo hincapié en el valor de los restos que aparecen en una excavación por insignificantes que parezcan, fomentando de esta manera el respeto por el patrimonio cultural: histórico, arqueológico y la sensibilización por el mismo.
De esta forma se ha hecho un pequeño simulacro de cómo excavar y qué herramientas y elementos de seguridad se utilizan.
Los niños y las niñas han podido experimentar, haciendo una recreación de una excavación en cajones portátiles llenos de arena, en los que se han enterrado restos cerámicos que los niños, según las explicaciones dadas por el alumnado de “El Trampín”, tenían que sacar a la luz. Actividad que se seguirá manteniendo durante el verano con los distintos turnos del campamento de verano.
Diecinueve niños en edades comprendidas entre 7 y 11 años experimentaron la sensación de sentirse arqueólogos por unas horas, ya que el alumnado de la Escuela Profesional “El Trampín” explicaron la historia de las ruinas del convento Franciscano de Santiago haciendo hincapié en el valor de los restos que aparecen en una excavación por insignificantes que parezcan, fomentando de esta manera el respeto por el patrimonio cultural: histórico, arqueológico y la sensibilización por el mismo.
De esta forma se ha hecho un pequeño simulacro de cómo excavar y qué herramientas y elementos de seguridad se utilizan.
Los niños y las niñas han podido experimentar, haciendo una recreación de una excavación en cajones portátiles llenos de arena, en los que se han enterrado restos cerámicos que los niños, según las explicaciones dadas por el alumnado de “El Trampín”, tenían que sacar a la luz. Actividad que se seguirá manteniendo durante el verano con los distintos turnos del campamento de verano.
