El sentido común y la ética
Sentido común Capacidad de entender o juzgar de forma razonable.
Diccionario de la Real Academia de la Lengua
Ética. Parte de la filosofía, que trata de la moral y de las obligaciones del hombre .El objeto de la ética es la moralidad, y por moralidad se entiende el carácter de bondad o de malicia de las acciones humanas; pero como al fin las acciones humanas adquieren este carácter según la relación que guardan con el deber, podría decirse que el deber en general, es el objeto de la ética. (ESPASA).
Sabemos, porque está demostrado, que el coste del transporte por carretera es casi el doble que por ferrocarril.
Si el trasporte por carretera, en una zona agrícola como la nuestra, es el único posible para sacar los productos desde el centro de producción al de distribución.
Si hay estudios que han determinado que la distancia, que no hace rentable estos portes por carretera al centro de distribución, está en torno a los 60 Km.
¿No nos indica el sentido común que el punto de distribución deberá estar situado en el centro de una circunferencia, dentro de cuyo radio se encuentren los centros de producción, y que estos no deben superar los 60 Km?
Si además, en nuestra provincia, hay una población en la que el 70% de la producción exportable se encuentra dentro de una radio de 60 Km., siendo además el mejor nudo de comunicaciones tanto por carretera como por ferrocarril de toda Extremadura.
Cualquiera, con sentido común, determinará que para hacer rentable la salida de nuestros productos, tanto al resto de España como fuera de ella, y obtener así, un mayor beneficio en nuestras empresas, disminuyendo considerablemente los costes totales de los portes y el tiempo de entrega de los mismos.
Entonces ¿por qué algunos de nuestros políticos? Se empeñan en lo contrario, y se empecinan en un centro de distribución, con inversiones millonarias, en un extremo de la provincia, en la que la mayoría de los centros de producción agrícola están fuera de los 60 Km de distancia, y algunos a más de 110 Km. lo que supone el encarecimiento, de los portes y como consecuencia un mayor precio final y por consiguiente la disminución de la competitividad de nuestros productos, y la perdida de mercados.
¿Quién tendrá la responsabilidad de este futuro fracaso?
¿Quién asumirá lo que puede ser una inversión, con el resultado similar al del aeropuerto de Ciudad Real?
Porque quienes tienen el deber de buscar el bienestar de la población, y empleando el sentido común se sabe que esta ubicación no tiene ningún sentido, podemos llegar dentro de un análisis ético a su rechazo, ya que lo que se pretende es obtener una rentabilidad local a corto plazo, buscando su beneficio propio, sin tener en cuenta el perjuicio que se les hace a todos los extremeños.
Sentido común Capacidad de entender o juzgar de forma razonable.
Diccionario de la Real Academia de la Lengua
Ética. Parte de la filosofía, que trata de la moral y de las obligaciones del hombre .El objeto de la ética es la moralidad, y por moralidad se entiende el carácter de bondad o de malicia de las acciones humanas; pero como al fin las acciones humanas adquieren este carácter según la relación que guardan con el deber, podría decirse que el deber en general, es el objeto de la ética. (ESPASA).
Sabemos, porque está demostrado, que el coste del transporte por carretera es casi el doble que por ferrocarril.
Si el trasporte por carretera, en una zona agrícola como la nuestra, es el único posible para sacar los productos desde el centro de producción al de distribución.
Si hay estudios que han determinado que la distancia, que no hace rentable estos portes por carretera al centro de distribución, está en torno a los 60 Km.
¿No nos indica el sentido común que el punto de distribución deberá estar situado en el centro de una circunferencia, dentro de cuyo radio se encuentren los centros de producción, y que estos no deben superar los 60 Km?
Si además, en nuestra provincia, hay una población en la que el 70% de la producción exportable se encuentra dentro de una radio de 60 Km., siendo además el mejor nudo de comunicaciones tanto por carretera como por ferrocarril de toda Extremadura.
Cualquiera, con sentido común, determinará que para hacer rentable la salida de nuestros productos, tanto al resto de España como fuera de ella, y obtener así, un mayor beneficio en nuestras empresas, disminuyendo considerablemente los costes totales de los portes y el tiempo de entrega de los mismos.
Entonces ¿por qué algunos de nuestros políticos? Se empeñan en lo contrario, y se empecinan en un centro de distribución, con inversiones millonarias, en un extremo de la provincia, en la que la mayoría de los centros de producción agrícola están fuera de los 60 Km de distancia, y algunos a más de 110 Km. lo que supone el encarecimiento, de los portes y como consecuencia un mayor precio final y por consiguiente la disminución de la competitividad de nuestros productos, y la perdida de mercados.
¿Quién tendrá la responsabilidad de este futuro fracaso?
¿Quién asumirá lo que puede ser una inversión, con el resultado similar al del aeropuerto de Ciudad Real?
Porque quienes tienen el deber de buscar el bienestar de la población, y empleando el sentido común se sabe que esta ubicación no tiene ningún sentido, podemos llegar dentro de un análisis ético a su rechazo, ya que lo que se pretende es obtener una rentabilidad local a corto plazo, buscando su beneficio propio, sin tener en cuenta el perjuicio que se les hace a todos los extremeños.





















