Una plaza envenenada
Que el atleta montijano Javier
Cienfuegos es un deportista extraordinario no le cabe duda a nadie. Que además
de tener una increíble pericia a nivel físico, tiene una mente sana y
equilibrada, está bien claro en cuanto hablas con él dos palabras. Que estamos ante una persona de gran valía y
enorme mérito, que es un ejemplo para toda una generación es indudable.
Plusmarquista de lanzamiento de martillo, cinco veces campeón de España,
olímpico en los juegos de Londres y preparando la próxima olimpiada de Rio.…..es
un curriculum difícil de superar en estos lares. Que Montijo debe sentirse bien orgulloso de él y apoyarlo en su carrera deportiva creo que
es indiscutible. Que el ayuntamiento no ha acertado al crear una plaza envenenada, también.
La convocatoria para una plaza de
“Monitor deportivo con condición de deportista de élite” olía a chamusquina
desde el primer momento. En la fase de concurso solo se puntuaba haber participado en Olimpiadas y Campeonatos
del Mundo, de Europa, de España en los últimos cinco años. Solo faltaba poner
otra condición: llamarse Javier.
Rápidamente se revolucionó “el mundo de las sombras”, todas esas
personas que opinan en las redes sociales con pseudónimos y nombres falsos. En
principio cargaron contra el
ayuntamiento, por preparar un concurso adaptando las bases a una persona concreta,
algo que por cierto y por desgracia, ha ocurrido y sigue ocurriendo en
numerosas localidades. Y después, amparándose en el anonimato, empezaron a
cargar contra el propio Javier. Eso sí que me parece fuerte y rastrero porque
este chaval es de lo mejor que tenemos a nuestro alrededor
Cienfuegos ganó la plaza y con las
mismas, al ver el revuelo que se había montado, renunció a ella. Según manifestó en nuestros micrófonos
de EsRadio, con esa forma de hablar humilde y educada que tiene, lo ha hecho
porque no tiene necesidad de “todo este rollo”, lo que necesita de verdad es
enfocarse bien en el deporte porque este año es olímpico y allá va él otra vez,
con toda su fuerza. ¿De qué forma lo
puede ayudar su pueblo, a través de su ayuntamiento? Pues abiertamente. Muchas
veces los políticos se empeñan en hacer difíciles las cosas sencillas. Para qué
solicitar una plaza docente cuando Cienfuegos es un competidor nato. Sería como poner a
Fernando Alonso a dar clases de carnet de conducir. Para estar centrado en sus entrenamientos, lo mejor que se puede hacer por él es apoyarle
económicamente en su impresionante trayectoria a través de una subvención o una
beca. Sería una forma perfectamente legal de apoyar a este deportista
extraordinario que lleva el nombre de Montijo por todo el mundo con la cabeza
bien alta.
Mucha suerte, Javier. Eres un campeón en el deporte y en la vida.
Que el atleta montijano Javier Cienfuegos es un deportista extraordinario no le cabe duda a nadie. Que además de tener una increíble pericia a nivel físico, tiene una mente sana y equilibrada, está bien claro en cuanto hablas con él dos palabras. Que estamos ante una persona de gran valía y enorme mérito, que es un ejemplo para toda una generación es indudable. Plusmarquista de lanzamiento de martillo, cinco veces campeón de España, olímpico en los juegos de Londres y preparando la próxima olimpiada de Rio.…..es un curriculum difícil de superar en estos lares. Que Montijo debe sentirse bien orgulloso de él y apoyarlo en su carrera deportiva creo que es indiscutible. Que el ayuntamiento no ha acertado al crear una plaza envenenada, también.
La convocatoria para una plaza de “Monitor deportivo con condición de deportista de élite” olía a chamusquina desde el primer momento. En la fase de concurso solo se puntuaba haber participado en Olimpiadas y Campeonatos del Mundo, de Europa, de España en los últimos cinco años. Solo faltaba poner otra condición: llamarse Javier. Rápidamente se revolucionó “el mundo de las sombras”, todas esas personas que opinan en las redes sociales con pseudónimos y nombres falsos. En principio cargaron contra el ayuntamiento, por preparar un concurso adaptando las bases a una persona concreta, algo que por cierto y por desgracia, ha ocurrido y sigue ocurriendo en numerosas localidades. Y después, amparándose en el anonimato, empezaron a cargar contra el propio Javier. Eso sí que me parece fuerte y rastrero porque este chaval es de lo mejor que tenemos a nuestro alrededor
Cienfuegos ganó la plaza y con las mismas, al ver el revuelo que se había montado, renunció a ella. Según manifestó en nuestros micrófonos de EsRadio, con esa forma de hablar humilde y educada que tiene, lo ha hecho porque no tiene necesidad de “todo este rollo”, lo que necesita de verdad es enfocarse bien en el deporte porque este año es olímpico y allá va él otra vez, con toda su fuerza. ¿De qué forma lo puede ayudar su pueblo, a través de su ayuntamiento? Pues abiertamente. Muchas veces los políticos se empeñan en hacer difíciles las cosas sencillas. Para qué solicitar una plaza docente cuando Cienfuegos es un competidor nato. Sería como poner a Fernando Alonso a dar clases de carnet de conducir. Para estar centrado en sus entrenamientos, lo mejor que se puede hacer por él es apoyarle económicamente en su impresionante trayectoria a través de una subvención o una beca. Sería una forma perfectamente legal de apoyar a este deportista extraordinario que lleva el nombre de Montijo por todo el mundo con la cabeza bien alta.
Mucha suerte, Javier. Eres un campeón en el deporte y en la vida.