Detenidos por estafa tras usurpar la identidad de personas para contratar y adquirir terminales de telefonía móvil
La Guardia Civil detuvo e imputó a dos vecinos de Villafranca de los Barros y Almendralejo, ambos de 33 años de edad, como presuntos autores de los delitos de usurpación, falsificación y estafas.
A mediados del pasado año, un vecino de la
localidad de Villafranca de los Barros, denunció el cargó que le habían
realizado en su cuenta, por el importe de un contrato de varias líneas telefónicas
y la adquisición de tres teléfonos móviles de última generación, que nunca
realizó y recibió.
La Guardia Civil de Villafranca de los Barros
con las gestiones llevadas a cabo con las compañías telefónicas, pudo averiguar
que los terminales se entregaron a través de paquetería y recogidas en mano,
además de sospechar que pudieran haber usurpado la identidad del denunciante,
para contratar y adquirir los móviles.
Tras más de seis meses de investigación, los
agentes obtuvieron la identidad de la persona que usurpó la identidad de la
víctima, un vecino de Almendralejo, con antecedentes por hechos similares de
estafa.
Persona que se hizo pasar por la victima para
contratar líneas telefónicas y adquirir terminales de última generación, dando direcciones
domiciliarias ficticias.
Posteriormente para anticiparse a la entrega
por paquetería de los terminales, aludió que le sería más cómodo recogerla en
mano, en el punto de entrega más próximo que tuviera esa empresa. Una vez que
conseguía el paquete con los terminales, los vendía bajo precio a su cómplice.
Esta persona era el encargado de venderlos en tiendas de segunda mano de
telefonía móvil de las localidades de Mérida, Almendralejo y Badajoz, e incluso
a particulares
Así fue como a finales del pasado mes de
febrero, la Guardia Civil localizó y
detuvo a los presuntos autores de los hechos delictivos.
Aunque hasta la fechas solo constan dos
personas y diferentes compañías telefónicas perjudicadas, se baraja la
posibilidad de que pudieran existir más victimas, al averiguar los agentes que
estas personas y tras supuestas estafas, vendieron una treintena de teléfonos
en estas tiendas de segunda mano, por los que habrían obtenido un beneficio de
unos 10.000 euros.
Las
diligencias junto con la detención e imputación son puestas a disposición de
los Juzgados de Instrucción de Villafranca de los Barros.
A mediados del pasado año, un vecino de la localidad de Villafranca de los Barros, denunció el cargó que le habían realizado en su cuenta, por el importe de un contrato de varias líneas telefónicas y la adquisición de tres teléfonos móviles de última generación, que nunca realizó y recibió.
La Guardia Civil de Villafranca de los Barros con las gestiones llevadas a cabo con las compañías telefónicas, pudo averiguar que los terminales se entregaron a través de paquetería y recogidas en mano, además de sospechar que pudieran haber usurpado la identidad del denunciante, para contratar y adquirir los móviles.
Tras más de seis meses de investigación, los agentes obtuvieron la identidad de la persona que usurpó la identidad de la víctima, un vecino de Almendralejo, con antecedentes por hechos similares de estafa.
Persona que se hizo pasar por la victima para contratar líneas telefónicas y adquirir terminales de última generación, dando direcciones domiciliarias ficticias.
Posteriormente para anticiparse a la entrega por paquetería de los terminales, aludió que le sería más cómodo recogerla en mano, en el punto de entrega más próximo que tuviera esa empresa. Una vez que conseguía el paquete con los terminales, los vendía bajo precio a su cómplice. Esta persona era el encargado de venderlos en tiendas de segunda mano de telefonía móvil de las localidades de Mérida, Almendralejo y Badajoz, e incluso a particulares
Así fue como a finales del pasado mes de febrero, la Guardia Civil localizó y detuvo a los presuntos autores de los hechos delictivos.
Aunque hasta la fechas solo constan dos personas y diferentes compañías telefónicas perjudicadas, se baraja la posibilidad de que pudieran existir más victimas, al averiguar los agentes que estas personas y tras supuestas estafas, vendieron una treintena de teléfonos en estas tiendas de segunda mano, por los que habrían obtenido un beneficio de unos 10.000 euros.
Las diligencias junto con la detención e imputación son puestas a disposición de los Juzgados de Instrucción de Villafranca de los Barros.





















