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Pepe Pajuelo Pérez · Lobón | 196
Lunes, 06 de Mayo de 2013

Más allá del límite · Pepe Pajuelo Pérez · Lobón

Despertador. Bandeja bañada en oro. Desayuno de rey. Ducha en hidromasaje relajante. Camisa, gemelos, corbata y chaqueta. Que no falte la cartera.

Se inaugura la nueva sede de UGT Extremadura en Mérida fruto de una inversión de 2.700.000€ ¡¡¡CASI 3 MILLONES DE EUROS!!! que cuenta con una superficie de 2.820m2, lo que equivale a 94 nidos de golondrina de los que vendía ZP de 30m2.

Este proyecto, apoyado por el Ayuntamiento de Mérida gobernado en su día por el PSOE y que ni siquiera se llevó a Pleno me hace pensar que Cándido Méndez, Rubalcaba y compañía son, como miles de españoles en estos momentos, víctimas de la burbuja inmobiliaria.

Lo que más me sorprende es que dos días después de la inauguración del  cortijo millonario de los pobres de España –que suelta un olorcillo similar a la famosa FEVAL  del PSOE–  es que ellos mismos tienen convocada manifestaciones por toda Extremadura bajo el lema “No tienen límite”.

Si hacemos una comparativa entre los Sindicatos y el Gobierno de Extremadura durante la presente legislatura tenemos por un lado y por parte del Presidente Monago a un equipo competente, cumplidor de cuantos objetivos marca el Gobierno de España, comprometido con los jóvenes, motivando a emprendedores, atrayendo nuevas industrias , y entre otras muchas tareas, planteando un Campo del siglo XXI, principal motor de riqueza y fuente de ingresos de la mayoría de los extremeños.

Sin embargo, los del “límite”, que en realidad son los de “la mucha cara y la poca vergüenza”, a lo que se dedican durante una de las peores épocas que ha vivido España en su historia es a construirse chozos lujosos y a incitar a la violencia contra los que trabajan diariamente para hacer de Extremadura lo que se merece y no lo que se tiene merecido.

El dato: No está demostrado científicamente, pero cuenta la leyenda que una vez, en algún lugar recóndito de España, un sindicalista fue mileurista y trabajó honradamente  para sacar a su familia adelante, viviendo al “límite”.

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