Ha tenido una gran acogida, y pese a que el tiempo no ha acompañado totalmente, han podido realizar actividades lúdicas en bicicleta en las clases de EF.

Se ha utilizado el pabellón como improvisada cochera “o ‘bicicletera’, mejor dicho”, para protegerlas de la lluvia, y pese a que cayeron algunas gotas, “nuestros intrépidos alumnos se dieron cuenta de que es un excelente medio para divertirse y venir al centro sin depender tanto del coche, que tanto gasta y contamina”.

 
Además, ha servido para concienciarse de que es un estupendo instrumento al servicio de nuestra salud si lo usamos regularmente, y para darse cuenta de que podemos utilizarlo bastante más a menudo de lo que lo hacemos, y no depender tanto del coche.

Desde el centro “intentaremos ampliar los puestos para candar estos vehículos el año que viene, facilitando así que más alumnos y profesores puedan utilizarlos regularmente. Por eso instamos a los padres a que animen a sus hijos a utilizar la bicicleta para sus desplazamientos por el pueblo”.