El hombre es el animal que tropieza dos veces en la misma piedra y con muchas probabilidades de que tropiece tres. El primer tropezón con los socios listos termino en el 96 y el segundo en el 2011, en las dos ocasiones los socios listos y sus secuaces la montaron gorda de norte a sur y de este a oeste.
No quería escribir de política en estos días, pero no puedo cuando menos dar a pensar porqué nos pasan estas cosas.
Si observamos el sistema que tenemos, veremos que en lugar de tener democracia lo que tenemos es una “partitocracia”, es decir, todo gira en torno a los intereses de partido por encima de los intereses generales de la sociedad, con el bipartidismo podríamos decir: tanto monta, monta tanto…. Con un pequeño cambio de letra sería el PSOE como el PP, seguido de los nacionalistas y separatistas como los vascos, catalanes y gallegos, pero no quisiera ser pesado con la política, sino dar lugar a pensar.
Años y poder tuvieron los recién salidos y años y poder tuvieron los que acaban de entrar de nuevo. Esperemos que lo tengan también para cambiar estos pequeños entuertos que padece el sistema sobre el que viajamos, como si fuéramos dentro del caballo de Troya.
Seguro que el caballo de Troya de hoy no sería de madera sino de los materiales más vanguardistas, estas materias son: internet, cultura, información, viajes, etc. Por esto nos pasa lo de tropezar dos veces en la misma piedra, y tropezaremos tres y más si no se cambia el poder de la “partitocracia” que tan buenos frutos económicos les han reportado. De respeto y admiración sería el partido que cambiara las reglas del juego, para salir del círculo vicioso del poder partidista a favor de un gobierno tecnócrata o de congregación nacional, donde el ciudadano pueda pedir responsabilidades a su gobierno, como el cliente a su gestor cuando este incumpla el contrato, por tanto, enfrentarnos o criticarnos entre los clientes defendiendo cada uno a su gestor no es lo más correcto, siendo esto más un problema de los clientes que del gestor, pero por si los clientes no se han enterado, los gestores llamados PSOE, PP y demás, sólo cumplen con su deber como partido, pero nada más, todo lo demás es querernos engañar a nosotros mismos. No quería escribir de política, sólo dar lugar a pensar, no a los clientes, sino a los gestores. Sería incongruente pedir a un caimán que cuidara de un niño enfermo o a un zorro de un gallinero.
Los partidos políticos son lo más parecido a las sectas religiosas, con sus líderes, sus seguidores, sus mensajes de salvación, sus reuniones secretas, en fin, que no hay más ciego que el que no quiere ver. En estas elecciones mi voto se lo doy a los votantes, porque muchos se han puesto las gafas, votando al menos malo, sin ser el mejor, lo sería si cambiara las reglas del juego.