Cierra el Bar Dorado · Pedro y Alfonso Dorado Hernández · Montijo
Cierra el Bar Dorado.
Hoy día 20 de abril de 2011 cierra sus puertas el Bar Dorado por jubilación de Alfonso Dorado, quien junto con su padre Pedro Dorado han estado sirviendo café alrededor de 60 años.
Se cierra algo más que un local, se cierra un lugar de encuentro que ha estado allí impasible a lo largo de las últimas décadas y que ha visto como ha cambiado todo a su alrededor, como la Plaza de Abastos, la Fonda Enrique, la churrería de Alfonso, la carnicería de Serafín, etc. Y allí seguía, en la esquina, divisando por sus dos ventanas todos estos cambios.
También pasará a la memoria colectiva de Montijo este bar, puesto que han sido varias generaciones de montijanos y montijanas a las que por allí han pasado. Este bar lo abrió Pedro Dorado, que era barbero de profesión, en la cuadra de su casa y poder tener así algunos ingresos más. Abrían a eso de las 5 de la mañana para dar café (de puchero y de contrabando) y aguardiente a los jornaleros que se citaban en el atrio a diario.
Un resumen del ambiente del bar lo hago desde un recuerdo que tenía de niño, es una escena, un momento que recuerdo, y es ver en el mismo sitio a una pareja de guardias civiles, un anciano contrabandista portugués, al alcalde charlando con un concejal de la oposición, un carnicero, un trabajador de banca, un maestro, dos jubilados y un cura. No sé si es significativo. Creo que eso no lo hacía el local, sino las personas que lo han llevado con mucho trabajo y sacrificio.
Para mí y mi hermano ha sido un sitio de formación en valores como el sacrificio, el esfuerzo, la solidaridad y el respeto a los demás. Hemos crecido allí y creo sin duda que somos lo que somos por todo esto, y que se lo debemos a mi padre y a mi madre, ya que su ejemplo nos sirve a diario a tirar para adelante y ver que con esfuerzo, tesón y cariño se consigue ser feliz.
Cuantas Ferias en el atrio, cuantos mercadillos, cuantos recuerdos. Se cierra pero Alfonso y Josefina se llevan el cariño de muchos vecinos. El Bar Dorado se cierra, y se cierra como abrió, sin ruido y sin cartel que lo anuncie.
A Pedro, Teresa, Alfonso y Josefina.Pedro y Alfonso Dorado Hernández
Cierra el Bar Dorado.
Hoy día 20 de abril de 2011 cierra sus puertas el Bar Dorado por jubilación de Alfonso Dorado, quien junto con su padre Pedro Dorado han estado sirviendo café alrededor de 60 años.
Se cierra algo más que un local, se cierra un lugar de encuentro que ha estado allí impasible a lo largo de las últimas décadas y que ha visto como ha cambiado todo a su alrededor, como la Plaza de Abastos, la Fonda Enrique, la churrería de Alfonso, la carnicería de Serafín, etc. Y allí seguía, en la esquina, divisando por sus dos ventanas todos estos cambios.
También pasará a la memoria colectiva de Montijo este bar, puesto que han sido varias generaciones de montijanos y montijanas a las que por allí han pasado. Este bar lo abrió Pedro Dorado, que era barbero de profesión, en la cuadra de su casa y poder tener así algunos ingresos más. Abrían a eso de las 5 de la mañana para dar café (de puchero y de contrabando) y aguardiente a los jornaleros que se citaban en el atrio a diario.
Un resumen del ambiente del bar lo hago desde un recuerdo que tenía de niño, es una escena, un momento que recuerdo, y es ver en el mismo sitio a una pareja de guardias civiles, un anciano contrabandista portugués, al alcalde charlando con un concejal de la oposición, un carnicero, un trabajador de banca, un maestro, dos jubilados y un cura. No sé si es significativo. Creo que eso no lo hacía el local, sino las personas que lo han llevado con mucho trabajo y sacrificio.
Para mí y mi hermano ha sido un sitio de formación en valores como el sacrificio, el esfuerzo, la solidaridad y el respeto a los demás. Hemos crecido allí y creo sin duda que somos lo que somos por todo esto, y que se lo debemos a mi padre y a mi madre, ya que su ejemplo nos sirve a diario a tirar para adelante y ver que con esfuerzo, tesón y cariño se consigue ser feliz.
Cuantas Ferias en el atrio, cuantos mercadillos, cuantos recuerdos. Se cierra pero Alfonso y Josefina se llevan el cariño de muchos vecinos. El Bar Dorado se cierra, y se cierra como abrió, sin ruido y sin cartel que lo anuncie.
A Pedro, Teresa, Alfonso y Josefina.Pedro y Alfonso Dorado Hernández
