Toreros extremeños
Antonio Ferrera nació en Ibiza, pero muy pequeño cambió las aguas del Mediterráneo por las del río Guadiana. Se instaló en Villafranco del Guadiana y muy joven empezó con la idea de ser torero y lo consiguió porque siempre demostró su categoría y aún hoy, siendo uno de los toreros más veteranos, sigue demostrando que es el mejor, esta vez lo ha hecho en la Plaza de México, considerándolo el mejor valorado por la crítica mexicana y ocupando los primeros puestos del escalafón español. Tiene el cuerpo cosido a cornadas, hasta 35 heridas por asta de toro, dice que son como medallas que condecoran su cuerpo de valiente. Su lidia es muy sentida, cala siempre en el público al que pone en pie. En este último triunfo en la plaza mexicana, cortó dos orejas al cuarto toro, con una estocada perfecta, con la que el toro rodó sin puntilla, Ferrera paseó sus triunfos junto a Javier Borrego y su hijo, dueños de la ganadería Santa Bárbara.
Hay toreros que dedican estas fechas invernales para dedicarse a otros menesteres; el torero Joselito Adame, triunfador este año en las plazas españolas, ha decidido decir sí, contrayendo matrimonio el día 16 de diciembre, antes de terminar el año, siendo una de las bodas toreras más esperadas, se casó con Estefanía Herrera y la celebración fue por todo lo alto, en la catedral de la Asunción y todo rodeado de detalles taurinos, sobre todo en la emotiva fiesta de la tarde y noche.
La trashumancia es otra de las tradiciones que encuentra un gran aliciente en las corridas de toros, actividad, que al igual que la mayoría de aquellas del mundo rural, encuentra una gran simbiosis entre naturaleza y hombre, de gran valor ecológico, la trashumancia ayuda a controlar las malezas de prados y bosques, evitando así la proliferación de incendios forestales, su carácter seminómada, ayuda a que los campos se regeneren y el estiércol del ganado fertilizan los suelos por donde pasan y pastan.
Hay un partido político que está haciendo campaña, sobre todo en Andalucía, que dice que van a llenar las carreteras de vallas publicitarias en contra del mundo del toro, los antitaurinos siguen haciendo estragos, esta vez en el chalet de Morante de la Puebla, donde realizaron pintadas poco agradables en la que lo tachaban de nazi y que lo suyo sería tiro y cuneta, las considero muy desafortunadas, pero este es un país libre y aquí hacemos y deshacemos a nuestro aire.
En el apartado de cantantes que han cantado al toro, hoy traigo al gran Antonio Molina, que murió en 1992, hace ya 26 años, Cruz Díaz le dedicó una poesía de despedida:
Que se ponga crespones la alegría y España un corazón de luto y grana, y que llore su muerte la campana, sobre el ancho dolor de Andalucía, hay un lirio de llanto y agonía, bajo el negro perfil de la mañana, y un silencio en la copla soberana, sobre un lucero de tu frente fría, fuente de luz sonora, piel de río, clarín del aire en torres de amapola.
Antonio Ferrera nació en Ibiza, pero muy pequeño cambió las aguas del Mediterráneo por las del río Guadiana. Se instaló en Villafranco del Guadiana y muy joven empezó con la idea de ser torero y lo consiguió porque siempre demostró su categoría y aún hoy, siendo uno de los toreros más veteranos, sigue demostrando que es el mejor, esta vez lo ha hecho en la Plaza de México, considerándolo el mejor valorado por la crítica mexicana y ocupando los primeros puestos del escalafón español. Tiene el cuerpo cosido a cornadas, hasta 35 heridas por asta de toro, dice que son como medallas que condecoran su cuerpo de valiente. Su lidia es muy sentida, cala siempre en el público al que pone en pie. En este último triunfo en la plaza mexicana, cortó dos orejas al cuarto toro, con una estocada perfecta, con la que el toro rodó sin puntilla, Ferrera paseó sus triunfos junto a Javier Borrego y su hijo, dueños de la ganadería Santa Bárbara.
Hay toreros que dedican estas fechas invernales para dedicarse a otros menesteres; el torero Joselito Adame, triunfador este año en las plazas españolas, ha decidido decir sí, contrayendo matrimonio el día 16 de diciembre, antes de terminar el año, siendo una de las bodas toreras más esperadas, se casó con Estefanía Herrera y la celebración fue por todo lo alto, en la catedral de la Asunción y todo rodeado de detalles taurinos, sobre todo en la emotiva fiesta de la tarde y noche.
La trashumancia es otra de las tradiciones que encuentra un gran aliciente en las corridas de toros, actividad, que al igual que la mayoría de aquellas del mundo rural, encuentra una gran simbiosis entre naturaleza y hombre, de gran valor ecológico, la trashumancia ayuda a controlar las malezas de prados y bosques, evitando así la proliferación de incendios forestales, su carácter seminómada, ayuda a que los campos se regeneren y el estiércol del ganado fertilizan los suelos por donde pasan y pastan.
Hay un partido político que está haciendo campaña, sobre todo en Andalucía, que dice que van a llenar las carreteras de vallas publicitarias en contra del mundo del toro, los antitaurinos siguen haciendo estragos, esta vez en el chalet de Morante de la Puebla, donde realizaron pintadas poco agradables en la que lo tachaban de nazi y que lo suyo sería tiro y cuneta, las considero muy desafortunadas, pero este es un país libre y aquí hacemos y deshacemos a nuestro aire.
En el apartado de cantantes que han cantado al toro, hoy traigo al gran Antonio Molina, que murió en 1992, hace ya 26 años, Cruz Díaz le dedicó una poesía de despedida:
Que se ponga crespones la alegría y España un corazón de luto y grana, y que llore su muerte la campana, sobre el ancho dolor de Andalucía, hay un lirio de llanto y agonía, bajo el negro perfil de la mañana, y un silencio en la copla soberana, sobre un lucero de tu frente fría, fuente de luz sonora, piel de río, clarín del aire en torres de amapola.






















