Estoy en esto de la prensa y la información gracias a dos presidentes de un equipo de fútbol. Ambos lo fueron de la U.D. Montijo. Emilio Macarro me convenció para que escribiese en la extinta “Hoja del Lunes” y Rafael Gómez Rodao me animó para que hablara, comunicara e informara desde la radio. Comencé haciéndolo, hace más de treinta y tres años, en Radio Extremadura que entonces dirigía Julio Luengo, teniendo a Ángel Luís López como jefe de la programación deportiva. “Tiempo al deporte” y “Extremadura deportiva” eran los programas del momento.

Recuerdo a todo un elenco de compañeros de diferentes puntos de la geografía extremeña que entrábamos, durante la sobremesa, en circuito regional de tres a cuatro de la tarde. Era entonces cuando en la emisora, Isabel Gemio, hacía sus primeros “pinitos” en la comunicación. Cuando escribo este artículo hay un desafiante cielo azul que aviva un sol justiciero que derrama, bajo el bochorno, la melaza de la memoria de un tiempo de fútbol.

Fue allí, en tierras valencianas, en Xátiva, cuando el C.D. Badajoz se enfrentó al Olímpic en el último partido de la temporada 1978-1979, jugándose la permanencia en el Grupo II de la Segunda División B. Aquel fue el primer partido de fútbol que radié, junto a Ángel Luís López. El presidente del equipo pacense era Carlos Uriarte y entrenador el húngaro Tho Zele. Destacaban jugadores como Corrales, Cepas, Toni Tienza, Lavado, Bermejo, Marmesat, Borrego… El milagro lo obró en el último minuto Cepas, que rompió la igualada con un centro-chut, consiguiendo la victoria el Badajoz, permaneciendo en la categoría y a la vez enviando al C.P. Cacereño a Tercera División. Ángel Luis se quedó sin voz al cantar el gol y tuve que continuar solo con la narración y las entrevistas. Al final del encuentro aquello fue un desmadre. Narrar un partido de fútbol siempre me impresionó porque, afortunadamente, nunca me faltaron las palabras ni la voz.

Después vinieron años inolvidables en Radiocadena Española, junto a mi hermano José Antonio Lagar, con multitud de horas de partidos de fútbol durante las tardes de los domingos. Etapa que me deparó la narración de otro encuentro memorable. Se disputó el 22 de octubre de 1986 siendo presidente Emilio Macarro y entrenador Paco Cordero. Me refiero al encuentro de la Copa del Rey entre la U.D. Montijo y la Real Sociedad de John Benjamin Toshack. El equipo donostiarra que se llevó en Zaragoza la copa en la final frente al Atlético de Madrid, ganó por la mínima gracias a un tanto en un dudoso fuera de juego, que concedió el “malo” del colegiado andaluz Caetano Bueno.

La Real Sociedad vino con toda su artillería: Arconada, Larrañaga, Gorriz, Beguiristain, Baquero, Zamora, López Ufarte… El Montijo lo hizo con Portu, Emilio, Valentín, Barril, Barragán, Doncel, Chovi… Narré el partido con Juan Carlos Carmona y nos acompañaron Manolo Pérez, Pedro Díaz Tardio y Joaquín Cuadrado. Después dejé de hacer información deportiva, regresando de nuevo a la radio en 1999 con la emisora que ahora cumple 25 años, Radio Montijo, aunque no he vuelto a ejercer la locución de ningún encuentro.

Dicen que ahora la verdadera Fiesta Nacional es el fútbol. Sobre este deporte que está celebrando un Concilio Mundial, lo hace cada cuatro años, afirman que en el Génesis, dijo Dios…. ¡hágase! Y así fue. El beticismo, que está en horas bajas, siempre ha asegurado que el Betis fue creado por Dios, en tanto que cuando hizo la tierra, ésta la pobló de verde y pronunció “Viva el Betis manquepierda”. La tierra es redonda y el balón de fútbol también lo es. El fútbol es, no descubro nada nuevo, un fenómeno social de masas. Casi todas las mañanas, en la Puerta de la Villa de Mérida, el exportero del Montijo, Pedro Amador, me recuerda por qué estoy en esto de la información: “Pedrito, otro tirito”.