CARTAS DESDE EL NORTE
Elogio de la Hipocresía
Si hombre, me he levantado esta mañana de Martes y, como siempre, miro la Televisión mientras desayuno. El Informativo de la Primera me dice que ha muerto Ángel Cristo. Dicen que de un paro cardíaco, pero todos sabemos que es lo que le ha matado.
Como entiendo algo de Informativos en Directo, no me extraña nada de lo que veo. Cuando un presentador comenta una noticia hay que “cubrirlo” con imágenes para que no parezca un busto parlante. Y eso es lo que hoy han hecho todas las Cadenas. Acuden al archivo y mezclan todo el material que tenían del Domador con imágenes rodadas esta misma noche en el Hospital del Alcorcón, donde ha fallecido. Son estas imágenes recientes las que me han impactado.
Todos sabemos ya lo que se cocía entre el domador y su ex, Bárbara Rey. Se ha comentado y escrito de todo. Se han pagado buenas sumas de euros por juntarlos en un Plató y que se pongan a parir. Que Cristo era un degenerado que, a base de vicios, ha terminado con su vida, no lo duda nadie. Como tampoco se duda que, un mal día, no solo se le fue la pinza…se le cayó todo el tendedero. Ha habido una temporada en que no se emitía un solo programa del Corazón en que no se hablara de lo malo y cabrón que era este tío con su mujer y sus hijos. Hoy, con ocasión de su muerte, su ex y sus hijos vuelven a salir en pantalla pero eso si, compungidos y llorosos. No lo entiendo. Apuesto a que Las Norias, los Donde Estás Corazón, las Tómbolas, los Sálvame y demás porquerías televisivas especializadas en revolcarse en la mierda y las miserias ajenas, no van a acabar la semana sin hablar de esta muerte y de lo que la precedió, pagando a quien vaya a los Platós y muy bien, por cierto. Ya lo veremos.
¿Sabéis lo que pasa…? que cualquier tío de este País que haya tenido una bronca con su mujer se convierte en sospechoso de maltrato. Y que muchas de estas famosillas que han vivido bajo el paraguas protector de los personajes que han sido sus maridos, se sienten más seguras con cámaras de por medio. Yo, que me considero una persona simple me pregunto…¿por qué tanto llanto e hipos de desconsuelo?. ¡¡¡ a ver si va a resultar que este tío no era tan malo !!!. Y mi simpleza me lleva a sentir odio por la gente que derrama lágrimas después de haberte hecho todo el daño posible. HIPÓCRITAS. Ángel Cristo no necesitaba que nadie le empujara, se iba a caer él solito, era un muñeco roto. Pero no es justo que hayan vivido de las antiguas glorias de esta marioneta mediática a base de ir, de Cadena en Cadena, poniéndole a parir porque me temo que esto no se acaba con su muerte y que seguirán cobrando por revelar aspectos escabrosos de la vida de este… ¿artista?. Y más ahora, que ya no se puede defender. Haya muerto de lo que haya muerto, bien muerto está. Pero el haberse descontrolado con tanto vicio y malas maneras no le concede a nadie el derecho a seguir machacándolo y menos aún, a seguir cobrando por ello. Eso es lo que llamo el nuevo ELOGIO DE LA HIPOCRESÍA que nos imponen desde las Televisiones que juzgan más el incremento de audiencia que los sentimientos. Y para que quede claro, no defiendo a un maltratador como Ángel Cristo, defiendo el derecho de un cadáver a poder descansar en paz.
Si hombre, me he levantado esta mañana de Martes y, como siempre, miro la Televisión mientras desayuno. El Informativo de la Primera me dice que ha muerto Ángel Cristo. Dicen que de un paro cardíaco, pero todos sabemos que es lo que le ha matado.
Como entiendo algo de Informativos en Directo, no me extraña nada de lo que veo. Cuando un presentador comenta una noticia hay que “cubrirlo” con imágenes para que no parezca un busto parlante. Y eso es lo que hoy han hecho todas las Cadenas. Acuden al archivo y mezclan todo el material que tenían del Domador con imágenes rodadas esta misma noche en el Hospital del Alcorcón, donde ha fallecido. Son estas imágenes recientes las que me han impactado.
Todos sabemos ya lo que se cocía entre el domador y su ex, Bárbara Rey. Se ha comentado y escrito de todo. Se han pagado buenas sumas de euros por juntarlos en un Plató y que se pongan a parir. Que Cristo era un degenerado que, a base de vicios, ha terminado con su vida, no lo duda nadie. Como tampoco se duda que, un mal día, no solo se le fue la pinza…se le cayó todo el tendedero. Ha habido una temporada en que no se emitía un solo programa del Corazón en que no se hablara de lo malo y cabrón que era este tío con su mujer y sus hijos. Hoy, con ocasión de su muerte, su ex y sus hijos vuelven a salir en pantalla pero eso si, compungidos y llorosos. No lo entiendo. Apuesto a que Las Norias, los Donde Estás Corazón, las Tómbolas, los Sálvame y demás porquerías televisivas especializadas en revolcarse en la mierda y las miserias ajenas, no van a acabar la semana sin hablar de esta muerte y de lo que la precedió, pagando a quien vaya a los Platós y muy bien, por cierto. Ya lo veremos.
¿Sabéis lo que pasa…? que cualquier tío de este País que haya tenido una bronca con su mujer se convierte en sospechoso de maltrato. Y que muchas de estas famosillas que han vivido bajo el paraguas protector de los personajes que han sido sus maridos, se sienten más seguras con cámaras de por medio. Yo, que me considero una persona simple me pregunto…¿por qué tanto llanto e hipos de desconsuelo?. ¡¡¡ a ver si va a resultar que este tío no era tan malo !!!. Y mi simpleza me lleva a sentir odio por la gente que derrama lágrimas después de haberte hecho todo el daño posible. HIPÓCRITAS. Ángel Cristo no necesitaba que nadie le empujara, se iba a caer él solito, era un muñeco roto. Pero no es justo que hayan vivido de las antiguas glorias de esta marioneta mediática a base de ir, de Cadena en Cadena, poniéndole a parir porque me temo que esto no se acaba con su muerte y que seguirán cobrando por revelar aspectos escabrosos de la vida de este… ¿artista?. Y más ahora, que ya no se puede defender. Haya muerto de lo que haya muerto, bien muerto está. Pero el haberse descontrolado con tanto vicio y malas maneras no le concede a nadie el derecho a seguir machacándolo y menos aún, a seguir cobrando por ello. Eso es lo que llamo el nuevo ELOGIO DE LA HIPOCRESÍA que nos imponen desde las Televisiones que juzgan más el incremento de audiencia que los sentimientos. Y para que quede claro, no defiendo a un maltratador como Ángel Cristo, defiendo el derecho de un cadáver a poder descansar en paz.